5 EENO KIMIIhIIRI * Club Latinoamericano * Contraste Insalvable * Sociedad de Bienestar eintid6s afos despues Latinoamerica vuelve sobre sus pasos con la asfixia de la crisis global como detonante de conflictivos sin paralelismos posibles. Fue en 1986, un afo caracterizado en M6xico por el "boom" del narcotrafico y el inicio de la escalada represiva contra lideres de opinion y dirigentes opositores inc6modos al establishment, cuando el entonces president de Argentina, Rail Alfonsin, se anim6 a plantear a sus co- legas de la region, desde la Patagonia hasta M6xico, la posibilidad de crear un "club de deudores" capaz de hacer frente a la usura desme- dida de los acreedores internacionales, beneficiaries director de las politicas proteccionistas de la Casa Blanca. Aquello no era disparatado frente a la declaraci6n extremist del cubano Fidel Castro quien, de plano, abog6 entonces por declarar la moratoria ante la inmoralidad de los altos reditos impuestos a los pueblos en desarrollo sometidos a los financia- mientos de los agiotistas insondables que medraban hasta con los mercados a future con escandalosa prepotencia. Fue en ese tiempo cuando, de hecho, se hipotecaron buena parte de los recursos naturales del continent como parte de las "medidas reordenadoras" implementadas por el Fondo Monetario Interna- cional que, por supuesto, boicote6 la propuesta argentina y la desarroll6 a trav6s de un cabildero excepcional: quien ejercia la presidencia en M6xico, Miguel de la Madrid Hurtado quien, fiel a su segundo apellido, birl6 al pais algunas de sus grandes posibi- lidades potenciales. El mandatario mexicano, desde luego, viaj6 a Buenos Aires para entrevistarse, en la Casa Rosada, con el ponente en pro de un bloque justiciero que afianzara lo que debi6 estar unido siempre, con solidez ademas, como perfil6 el legendario "suefio de Bolivar". Y fue 61 el apologista de la renegociaci6n discre- cional, unilateral, por parte de cada naci6n para evitar con ello cualquier possible enroque cuyos efectos siquiera paralizaran las ambiciones desatadas de los financieros prestamistas listos a hincarles los dientes a las riquezas ajenas a costa de entregarles mendrugos para solventar los apremios artificiales elevados a la condici6n de asfixiantes. Se decia que las deudas eran ya incon- trolables y requerian el salvamento de los "generosos" acreedo- res internacionales listos a crear nuevas lines de financiamien- tos apretando los cinturones de las sociedades en desarrollo e inhabilitandolas, de hecho, para crecer en consonancia con sus verdaderas capacidades y recursos. Bien se dice que cuanto dio a M6xico la naturaleza nos debi6 situar entire las grandes potencias del orbe; y si no lo estamos es a causa de las peores administraciones imaginables y la propensi6n soste- nida a la corrupci6n que obnubila mentes y destruye conciencias. Asi, la aportaci6n delamadridiana, al quebrar la estrategia argentina, rindi6 pingues beneficios a los duefos del dinero, concentrados los mas en Wall Street, y convirti6 al grupo en el poder, al cerrado circulo que reverenciaba a De la Madrid y le llamaba maestro, en element central para mantener el estado de cosas bajo la egida del neoliberalismo mal llamado social. De esta entrafia surgi6 Carlos Salinas, visto como economist genial, y luego Ernesto Zedillo, el gran simulador quien entreg6 la rectoria political del pais a los man- dantes de Washington. Las consecuencias bien las conoceremos. Hasta el moment no se ha escrito la verdadera historic de aquella cruzada fervorosa del sefor De la Madrid si bien se co- noce el trayecto de este, protegido por sus sucesores y tambien por algunos de sus pupilos y efebos, como el yucateco Emilio Gamboa, otrora secretario muy privado del personaje durante la gesti6n presidential del mismo. Y pudo paliar la nostalgia del poder, arguyendo su gris conduct political, "creciendo hacia dentro", como defini6 su antecesor L6pez Portillo, al exhibir su heredad particular de Coyoacan como ejemplo evidence de su modus operandis: compr6 las casas circundantes y presumi6 por permanecer en la misma residencia agigantada. Un regimen, desde luego, muy austero. Durante dos decadas largas, las aplicaciones sirvieron para fomentar la especulaci6n de la mano de la demagogia. El Banco de M6xico acumul6 reserves en niveles record que, finalmen- te, sirvieron para blindar tardiamente los mercados saqueados cuando revent6 la crisis recesiva global y el peso, pese al amparo y respaldo de los muchos d6lares guardados, sufri6 una deva- luaci6n del treinta y cinco por ciento respect a la divisa estado- unidense. Todo, claro, al ritmo impuesto por Wall Strett, como reconoci6 el zapateadoo" junior Bush, en detrimento, sobre todo, de las naciones satelites como M6xico. A toro pasado, los propios predadores, como Salinas, hablan de la "decada perdida" para tratar de evadir su propia responsabili- dad hist6rica y delimitar los traspies lejos de su propio entorno, esto es como si los "malos" fueran otros. Sin embargo, las crisis econ6micas recurrentes comenzaron, en M6xico, desde 1975, hace mis de treinta afos, como sentencia lapidaria contra el populismo irresponsible y derrochador, tambien hondamente corruptor, que a la larga s6lo estimul6 la avaricia de los grandes inversionistas con capacidad para aprovechar las ofertas estata- les posteriores. Y cuando lleg6 en 1982 la estatizaci6n bancaria, a los grandes accionistas de las instituciones financieras les fue pagada la indemnizaci6n mis onerosa y redituable de cuantas se tengan memorial. Jamis perdieron, ipero c6mo lloraron! Perdida la batalla en pro del frente comun nos llovieron condi- ciones que todavia estan cubriendose. Por ejemplo, la reform energetica, concebida por el salinismo, instrumentada por el zedillismo y ejecutada por el gobierno de Calder6n -los Fox, sencillamente, evadieron responsivas y funciones-, es desenlace evidence de cuanto se fragu6 en el amargo 1986 cuando De la Madrid corri6 a la capital gaucha en calidad de mensajero del FMI, esto dejando en el maletero la banda tricolor mancillada, y bloque6 la iniciativa de Alfonsin. Con esta carga ominosa llegamos al convulso present cuando la historic se repite mientras los grandes vencedores, los especula- dores, se frotan las manos otra vez. DEBATE En Sudamerica reprochan al gobierno mexicano haber optado por "mirar primero hacia el norte" desligindose de la hermandad hist6rica con las naciones latinoamericanas. De hecho, asi lo anunci6 Carlos Salinas, en 1990, cuando, frustrado por no obte- 72 cancuissimo.com enero ?009