-81- interina. y sin ninguna guia :que nodeja de ser com prometida Algunas veces, sobre todo cuando el trabajo ha sido largo que las aguas se han salido con antici- pacion que el cordon umbilical ha pasado al rede- dor de su cuello y le ha apretado, sucede que el ni- fo llega a! mundo en un estado de muerte aparente. En este caso si esta violeta, livido, se deja sangrar el cordon cuando se corta y luego se aprieta lali-- gadura si con esto no vuelve se procurar porfric- ciones echas en la region del corazon insuliandole aire en la boca ccsitar la circulacion y la res pira- cion. Si est palido y es de apariencia dbil, se le frieciona con lana; se le sumerje en un bao tibio y aun animado con vino aguardiente. En fin, antes de fajarle y despues de ligado el cordon umbilical, se rodea con una conpresa hecha un agujero en medio que se quema y empapa en manteca sin sal aceite de pulo y luego se le po- ne otra tambien tn.i..1 en lo misino, que se fijarn con una venda de cerca de tres dedos de ancho co- sida en el costado. Pero volvamos , la madre que la liemos dejado en su lecho de dolor, pues s.lido ya el nio no todo ha acabado para ella, le falta hallarse desembara- sada de las parias placentas, que forma el lazo por ,el cual ella estaba unida su hijo. La natu- raleza podria seguramente en la mayor parte de los casos ser suficiente para este trabajo, sin embar- T. II