Bassilla Renju-Urasa, coordinadora ejecutiva de la Red de Mujeres Contra la Mutilaci6n Genital Femenina (NAFGEM) de Tanzania, sostiene que, aunque su pais prohibit la ablaci6n genital de la mujer o circuncisi6n femenina en 1998, esta prctica sigue estando vigente. "Existimos porque la legislaci6n no se aplica", afirma. bajan en la red NAFGEM han sufrido dicha mutilacin cuando eran nifias. Esta organizacin se encarga de difundir informacin y de docu- mentar casos reales con el propsito de cam- biar las actitudes hacia algunas costumbres muy arraigadas. En opinion de la NAFGEM, la educacin es fundamental para luchar contra la ablacin genital femenina. Muchas mujeres viven en zonas rurales muy alejadas, por lo que les es muy dificil llevar sus causes ante los tribunales. La pequefia oficina de la NAFGEM en el ter- cer piso de un edificio en una calle apartada de Moshi constitute el epicentro de un movi- miento que ha logrado cambios importantes en la region de Kilimanjaro. Sin embargo, segn nos cuenta Renju-Urasa, entire los masis la prctica de la mutilacin genital femenina sigue aplicndose rigurosamente. A lo cual afiade: "Los masis no pueden ima- ginarse a alguien sin circuncidar. Se trata de algo ineludible. Y las personas sin studios ... como las mujeres, lo aceptan". Justo en las afueras de Chekimaji, un pueblo enclavado a los pies del monte Kilimanjaro, una mujer y su hija de la tribu kamba se enfrentan a una situacin asi sin poder evitarla. El padre de la nifia, maestro de EDICION ESPECIAL N.E. DICIEMBRE 2009 escuela, talleclo recientemente y ahora su tio se ha hecho cargo de la familiar. Exige que la madre sea su concubina, a lo cual ella se ha negado. Furioso, el hombre afirma que dejar de pagar los studios de secundaria de Pascalini en Dar-es-Salaam. El tio quiere buscar un marido para la muchacha, pero esta debe estar circuncidada. La circuncisi6n tiene graves efectos psicolgicos y puede ser origen de trastornos fisicos que pongan la vida en peligro. En opinion de la NAFGEM, algunas nifias pueden tener posteriormente un desarrollo normal que impida el funcio- namiento habitual de algunos rganos. El procedimiento de mutilacin ms comn- mente utilizado implica simplemente el corte total o parcial del clitoris. El Plan de Acci6n para Luchar contra la Mutilacin Genital Femenina de Tanzania para el period 2001- 2015 tiene por objeto acabar con esta prc- tica, pero hasta ahora su eficacia ha sido escasa. El Cdigo Penal de 1930 castiga la ablacin genital femenina, pero la naturaleza pasiva de la aplicacin de esta ley hace que la prctica sea admitida. La mujer inform a las autoridades de las intenciones del tio de la muchacha, pero no obtuvo ninguna respuesta. Poco despus, su hija amenaz con quitarse la vida antes que someterse a la ablacin. Asustada por la vida de su hija e incapaz de confiar en las autoridades locales, la mujer pidi a una persona del pueblo que fuera a pedir ayuda a la NAFGEM. Al dia siguiente me traslad y habl con la mujer y su hija bajo la dbil sombra de un rbol. Durante la entrevista, Pascalini se mantuvo casi todo el tiempo callada, mien- tras la madre hablaba en su nombre: "Mi hija odia este infierno". La mujer tiene siete hijos, de los cuales cuatro son chicas. La familiar se siente abandonada y despreciada por todos los habitantes del poblado. Afirma que "La mayoria de las personas nos ha dejado de hablar". Tambin nos cuenta que en una carta sin firmar que alguien dej en la puerta de su casa se incluyen amenazas contra sus hijos. De regreso a Moshi, Renju-Urasa oye la noticia de que la muchacha en cuesti6n se enfrenta a la amenaza de ablacin genital femenina y comprueba que su miedo es real. Es necesario llevar a cabo una investiga- cin, pero slo por personas que conozcan bien las costumbres familiares de la region de Kilimanjaro, es decir por alguien de la NAFGEM. * Periodista con sede en Bruselas. Palabras claue NAFGEM; mutilacin genital femenina.