671 --- DiCCIONARIO ENCICLOPDICO DE LA MASONERA ORG los hechos que se atribuian en aquellos tiempos Orfeo: los dems poemas llamados rficos, pertenecen una po- ca much ms reciente. Entre el nmero de las poesas que se atribuyen Orfeo se citan ochenta y ocho himnos, y el Lithica, poema didctico que trata de las virtudes mgicas de las piedras, compuesto, segun se cree, en el siglo iv antes de nuestra era; y por ltimo, sesenta y seis versos del poema titulado De los temblores de tierra. Estos escritos diversos, hace ms de un siglo que son objeto de tantas dudas hiptesis como la existencia de su mismo autor. Antes de Nuet el mundo los tenia por autnticos, pero el sabio obispo de Atrantes, habiendo notado en ellos algunas ideas cristianas, fu el primero en sembrar la duda, y en suponer que estos escritos pueden datar muy bien de principios de nuestra era y proceder de la pluma de algun piadoso impostor. En las tradiciones masnicas se le present como uno de los grandes iniciados mas notables. Sediento de sabidura se dirigi, como hemos dicho, las Pirmides; se meta- morfose, por decirlo asi, en egipcio, se le inici en la teologa, en la fsica, en todos los conocimientos ocultos, y de tal modo se apropi las ideas y raciocinios de sus institutores, que sus himnos revelan mas bien al sacerdote que al poeta griego. De regreso la Grecia, instituy los misterios de los Cabires, el culto de Baco y de Cres, las orgas y las expiaciones. Se le represent al lado de Eur- dice, vestido con traje griego frigio, y rodeado de various animals atraidos por su canto (;).-V. Misterios. ORFEOTELESTE-Nombre que se daba, entire los grie- gos, al intrprete de los misterios introducidos por Orfeo en Grecia (*). ORFICAS-Orgas fiestas de Baco, llamadas as- por- que Orfeo fu su fundador, porque ste pereci en una de estas solemnidades (:). ORFICO-Lo perteneciente Orfeo (z). ORFICO (Doctor)-Titulo del grado 71.0 correspondien- te la tercera series (mstica) del Rito de Memfis (-). ORFICOS-Nombre de unos sacerdotes paganos que seguan las prcticas religiosas introducidas por Orfeo. Lla- mbase as una especie de congregacion que se estable- ci sin autorizacion legal, constituida, con corta diferencia, como se halla hoy dia la Francmasonera, con la distinction de que los miembros de aqulla se arrogaban las atribu- ciones del sacerdocio, y pretendian que estaba en su mano abrir las puertas del cielo sus adeptos, valindose de ciertas ceremonies religiosas. Se suponian depositarios de la doctrine de Orfeo, y se esforzaban por restituir los mis- terios a su verdadero origen y las ideas egipcias, afir- mando por lo tanto que Baco y Osiris no eran mas que un mismo dios. Las ceremonies secrets de su culto tenian lugar durante la noche: en ellas hacan conmemoracion de la historic de Baco muerto por los Titanes, embadurnando al candidate con barro en memorial del que emplearon aque- llos gigantes para enmascararse cuando resolvieron asesinar Baco. Al igual que en las fiestas sabasianas, la serpiente desempeaba un papel muy important en los misterios Orficos, y su aclamacion era la misma: Evoi, saboi, hyes. attes, attes, hyes. La iniciacion Orfica no brill tanto como las otras, porque no se mezclaba con el sacerdocio, y con- cluy por llegar ser del exclusive dominio de las classes mas ignorantes del pueblo; por lo cual adquiri algun as- cendiente durante los primeros siglos del cristianismo. En- tonces los pitagricos y los platnicos, que hacan todos los esfuerzos posibles para detener la inminente ruina del paganismo, la adoptaron yla pusieron en moda. Modifican- lo en cierto modo sus ritos, dieron Baco el sobrenom- bre de Fanes, el mas grande de los dioses, y principio lu- minoso de la Naturaleza; pero esta tentative no obtuvo el resultado que se esperaba, y no pudo impedir el triunfo definitive de las nuevas doctrinas (*). ORGANIZACION-Esta voz se aplica al conjunto de las diversas parties de que se compone el cuerpo social, una fraccion de l. La organization de un pais difiere de su constitution en que la una es simplemente la disposi- cion de los rganos y su apropiacion los usos que estn destinados, mientras que la otra es la vida dada estos rganos. Una es la parte anatmica; la otra la parte fisio- lgica; pero son necesariamente inseparables. No se puede ser legislator sin conocer el mecanismo de las sociedades en sus menores elements. El error del mayor nmero de publicistas consiste en establecer sistemas sin tender los cimientos que deben sostener su edificio. Antes de proponer ni emprender nada, importa asegu- rarse bien si los instruments de que se dispone no harn un servicio contrario al que se desea obtener. Aristteles, el mas positive de los publicistas antiguos, que se burlaba veces de las utopias de su maestro Platon, decia con ra- zon que la poltica es la ciencia arquitectnica. A los que piden los bienes y las ventajas sociales de que hoy estamos privados, no cesaremos de responderles: tened primero una organization que se preste al cumplimiento de vuestros de- signios. Pigmaleonhizo su estatua antes de pedir Jpiter que la animase. La organization es, pues, la gran obra de que ante todo es preciso ocuparse. Los pueblos expresan sus necesidades y sufrimientos, pero no siempre ven el remedio que conviene aplicarles. El mal depend generalmente de la mala organization del pais. El cambio de personas solo produce un remedio pa- sajero. As es que pretender, por ejemplo, que tal familiar vale mas que otra para gobernar, es no comprender que el mal est en el vicio de los rganos que forman el sis- tema. La organization de la sociedad siempre est acorde con la organization del poder. Si se ejerce la autoridad en nombre en el inters de uno solo, la organization poltica no se parece en nada la que conviene al sistema republi- cano. Para que el gobierno real tenga fuerza importa divi- dir hasta lo infinito el territorio, aislar las poblaciones unas de otras, y que al mismo tiempo los diversos brazos del poder supremo se reunan en la persona del mismo indivi- duo. El monarca ser bueno 6 malo segun el corazon la inteligencia que le hubiese dotado dado la Naturaleza, pero el sistema acrecienta tanto las dificultades, que las cualida- des bellas sirven para poco, mientras que las perversas ad- quieren el predominio funesto que con tan lgubre elo- cuencia nos testimonia la historic. En las repblicas puede encontrarse tambien el princi- pio monrquico: basta que sean oligrquicas invasoras. Estas repblicas, si bien pueden lograr esplendor y lustre, no expresan una sistematizacion de cosas definitivas. Ape- nas resuelven el problema de la organizacion municipal; y por eso las encontramos donde el municipalismo no ha dejado llegar los agregados territoriales mayores me- nores, indispensables los fines de la vida modern. Pu- dieron ser un fundamento primordial para organizer la sociedad definitivamente; pues bastaria haberlas eliminado la parte de despotismo, legalizar en ellas las reivindica- ciones del derecho personal, federal entire si sus autono- mas, y realizar directamente los corolarios todos del derecho pblico. Esto pudo hacerse perfectamente con las repblicas italianas de la Edad Media, si hubiesen estado formulados entonces los grandes principios de la vida mo- derna. Suiza, donde no actuaron las fuerzas centralizado- ras, que despues comenzaron su intervention en various puntos del territorio italiano, condensando en derredor de ellos masas territoriales proporcinadas la intensidad de aquellas fuerzas, vi subsistir el particularismo, y elevarse concepciones superiores de vida general mediante una federation continuamente perfeccionada. Igual fenmeno pudo realizarse en todas parties, si el mundo no hubiese habido de menester de la compacidad que le atribuy con sus medios crueles, es verdad, pero necesarios, el principio monrquico. Los pueblos llegaron tambien por otras vas la rep- blica: extenundose las monarquas por sus vicios, 6 des- pendose por sus errors. Y ahora hay aqu un fenmeno sociolgico tan important como natural: tales repblicas fueron siempre centralizadoras, absorbentes, dictatoriales y fugaces. O perseveraron en la arbitrariedad, ocasionando crueles restauraciones, hubieron de evolucionarse hcia la organization natural que informa el principio federativo. Tal ha sido su fatalidad; degenerar en la licencia, vol- ver la monarqua. No se conoce en la historic una sola repblica jacobina de alguna importancia donde no acon- teciese este fenmeno. Solo transformndose en federati- vas han logrado prevalecer, eliminando el autoritarismo y la oligarqua. Buen ejemplo el de gran parte de la Am- rica que fu espaola. Si un pais quiere pasar de la monarqua la repblica, no bastar para hacer complete la metamrfosis, enviar un centro comun representantes de las diversas parties del territorio, y nombrar en vez del rey una asamblea comi- t que ejerza los poderes: no se har con esto mas que una monarqua con muchas cabezas, que es la peor de todas las monarquas. Semejante poder solo ser temporal, aun- que capaz de grandes cosas y de esfuerzos colosales: testigo la Convention, que tuvo una inteligencia, una fuerza que jams se ha encontrado en la persona de ningun dictador; pero era impossible que se perpetuase su autoridad. La Convencion no fu mas que un poder constituyente.