453= DIcIOnuO EXNCILOPDIoaI IDA L MASONBnfA JES bastardear el espritu de la Masonera, ya para descubrir y publicar sus proyectos y medios de ejecucion. Acaso habr lector que dude de la influencia ejercita por la Masonera para derrumbar y aniquilar el despotismouAcasdhabr quien crea que cegados por un exagerado entusiasmo, atribuimos la Sociedad Masnica un powder muy dificil de alcanzar. Porque parece, en efecto, impossible que una Sociedad, cuyo nombre se oye pronunciar mnuy pocas veces5 que rara vez se manifiesta por actos pblicos, que es, enfn, casi un mito para muchos, haya ejercido tan decisive infl6encia en la march progresiva de la humanidad. Parece tntdbien impo- sible que se haya atrevido lachar, y lo 4ue e mas, que haya llegado vencer sociedades que encoiraban un fuerte apoyo en el inters de loa gobierno* despbticos, en la ignorancia de las muchedtnibres y en las cuantiosas ri- quezas que haban llegado acumular en el-tranScurso de muchos siglos. Y sin embargo, la Masonera cag siempre perseguida y proscrita; sin contar on ms reuros que los ahorros de los asociados, supo minar elpoderdle lor. jesuitas y de la Inquisicion, principles coltumnas que ostenian el powder absolute de los reyes y de los papas; sup'o destruir la ignorancia y el fanatismo, prin'cipaes *obstkLulos que se oponian la march ptogresiva de .la humanidad. Las pruebas de esto no las buscaremos en escritores masones que pudieran parecer parciales por sue entusiasmo hcia la Sociedad, las buscaremos entire los ma ncarnizados ene- migos de esta, y al efecto recordamos.l1a rabiosa impugna- cin de la Masonera hecha en nuestra patria por un ultra- montano con motivo de la traduccion de la historic de Clavel. "Los jesuitas, dice aquel, aeeriguaron -bien pronto quines eran los masones y cuales sus fines y-terideiceas, y una vez convencidos de la monstruosidad de la secta qoe se dirigia derribar el altar y el trono, se armaron de valor apostlico, y tanto en el plpito como en sus veraces ilustrados escritos, descubrieron la faz del Universo el horrendo crime que se premeditaba en las ocultas Logias. Descorrieron el engaoso velo que cubra la iniciacion-ma- snica, y se valieron de todos los recursos legales -que les sugiriera su santo celo, para apagar el fuego que comen- zaba harder, porque estaban ntimamente convencidos, de que si se le dejaba tomar cuerpo, concluiria por arrasar desde la nation ms poderosa, hasta el ms insignificant lugarcillo, lo mismo que sucedi." Contina despues el author de esta impugnacion, narrando los hechos que condujeron la expulsion de los jesuitas, asegurando que Choiseul que la llev cabo en Francia y contribuy ella en otros pauses, trabajaba en el misterio por inspiration de la Maso- nera. As mismo, pretend, que Federico el Grande, fu inspirado y servido tambien por la Sociedad-Masnica en la supresion de las rdenes monsticas. Por fin tiende de- mostrar que Voltaire, Alembert, Diderot y otros filsofos del siglo xvmg encontraban en esta Sociedad un gran auxi- liar para la propagacion de sus doctrinas. "No era possible, dice, que conociendo los jesuitas que la Masonera haba de ser la causa de todos los trastornos mrales y politicos de la Europa enter, dejasen de trabajar sin descanso y de cooperar eficazmente para destruir al infernal coloso que pretenda dominar en todo el globo. ... ..... "Los jesuitas, pues, tenan por pagar una deuda la Masonera; y h aqu que el duque de Choiseul, uno de sus ms celosos miembros, es el que se encarga de indemnizar la secta con usura"........... ... la secta con usura. . . . . . . . "Era intil cuanto se hiciese para conservar la Compaa de Jess: Choiseul con todos los impos estaban interesados en su esterminio, y no descansaron hasta ver coronada la obra comenzada. Los jesuitas aguardaban ya en Francia el ltimo golpe, y este lo recibieron el 6 de Agosto de 1762, en el que el Parlamento, supeditado, como hemos visto, por los sofistas, que primero se llamaron filsofos,, y despues (cuando lleg el caso de quitarse la mscara) Francmaso- nes, expidi un decreto por el cual dice: "Que hay abuso en el Instituto de la Sociedad que se llama de Jess, y en las bulas, breves, cartas apostlicas, constituciones, frmu- las devotas, decretos de los generals, y de las congrega- ciones generals de dicha Sociedad, etc.; y declarando esto declara por consecuencia al dicho Instituto inadmisible en toda nacion civilizada, como contrario al derecho natural, atentatorio toda autoridad spiritual y temporal, y que tiende introducir en la Iglesia y en los Estados, bajo el especioso velo de Instituto religioso, no una rden que as- pira verdadera y nicamente la perfeccion religiosa y evanglica, sino mejor dicho un cuerpo poltico, cuya esen- cia consiste en una actividad continue, para llegar desde luego por today especie de medios y caminos director in- directos, ocultos y manifiestos una independencia abso- luta, y sucesivamente la usurpacion de toda autoridad. "El duque de Choiseul, mejor dicho la Francmasonera, en virtud de cuyas rdenes obraba, no se satisfizo con los golpes que haban dado la Compaa de Jess en Portu- gal y en Francia; era necesario extinguirla si possible fuera en todo el globo. Mas debiendo ser esta obra del tiempo, se trat por el pronto de hacerla desaparecer de Espaa" "Ya hemos visto la influencia de los masones ingleses con Pombal, para que colocara la corona de Portugal sobre las sienes del Venerable mason el duque de Cumberland; hemos visto que el que dirigi y verific la expulsion de los jesui- tas en Francia, fu el Venerable mason duque de Choiseul y el mismo que influy directamente en la Espaa con los .m .e .r.r . . . . . . otros personages que tomaron part, ntimos y dignos ami- gos y compaeros suyos y de Voltaire, Alembert, etc. . "Fcilmente se concibe la influencia y powder que adqui- ri la Francmasonera en Espaa desde el 1727, que ya haba Logias en Madrid, hasta 1767 en que tuvo lugar la expul- sion de los jesutas. Los masones de Espaa saben muy bien que fu obra suya, y nosotros nos consta el lugar de distinction y aprecio que tienen entire ellos todos la mayor part de los que contribuyeron la infernal intriga que arrojara de Espaa los jesuitas." . . . . "Consumada la expulsion en Espaa, bien pronto se con- sigui lo mismo en Npoles, por la influencia del duque de Choiseul; mas ste la secta quien representaba, no satis- fecho an con esta venganza hcia los que en todos tiem- pos se declararon enemigos de la Francmasonera, se coali- gF con los gabinetes de Espaa, Portugal, Npoles, etc., para arrancar un breve de extinction general la Santa Sede." . . . . . "No debemos perder nunca de. vista esta Sociedad Se- creta, pues solo estudiando su origen, introduction y pro- pagacien, por los diversos estados y reinos de Europa, es como podemos comprender los acontecimientos que se han verificado en contra, del ata y del trono. En 1750, ya se la conocia en Npoles oy -por consiguiente tuvo tiempo para cooperar la persecution general que se declare contra los jesuitas, por ser sus irreconciliables enemigos, y los Guardias de Corps de la Santa Sede, como los llamaba Federico II, rey de Prusia." H aqu, pues, demostrado por un amigo de los jesuitas la guerra entire stos y la Masone- ra. El resultado, despues de siglo y medio de lucha, palpa- ble est. La Sociedad Masnica crece y se propaga cada dia mas, eetendiendo sus ramificaciones hasta las co- marcas ma as remotes de la tierra, y se afirma y robustece dia por da su opinion y crdito en el concept pblico. Los jesuitas han sido arrojados de todos los pases, y an cuando han vuelo -muchos, es lo cierto er que han perdido gran part de su prestigio y fuerza despues que pe han pro- bado sus inmorales doctrines y sus aspiraciones de domi- nacion universal. Los jesuitas tienen, como los francmaso- nes, sus pruebas de iniciacion y sus grades. Se hallan divididos en seis classes: profesos, coadjutores especiales, es- tudiantes- aprobados, hermanos legs coadjutores tempora- les, tovici"s yb afiliados jesuitas de hbito corto. Para pasar de una case otra, marcan perodos fijos, en virtud de los cuales -ninguno llega al grado de profeso sin dos aos de noviciado, site de studio, site de regencia, y otro de noviciado, y sin tener treinta y tires aos completos. A qu vienen estos impedimentos de tiempo en la carrera jesuti- ca, si la Compaa no guardase algun secret de importan- cia que solo los hombres bien probados pueda descubrir- se? En el interrogatorio de Chatel, uno de los asesinos de Enrique IV, se lee lo siguiente: "Preguntado si haba estu- diado teologa con los jesuitas, dijo que s, y que habia es- tudiado bajo la direction del padre Guret, con el cual estuvo dos aos y medio. Preguntado sobre si habia estado en la cmara de las meditaciones donde los jesuttas meten los grades pecadores, bajo el pretexto de reducirlos mejor vida, pero en realidad para exaltar sus nimos impelirles por medio de tales demostraciones cometer algun gran cr- men, dijo que haba estado en dicha cmara muchas veces. Preguntado sobre si la mxima del asesinato de los reyes era habitual en boca de los jesuitas, dijo que les haba odo decir que era permitido matar los reyes." Aqu tenemos los jesuitas, valindose de las mximas perniciosas propa- gadas por sus doctors y de una especie de fantasmagora