ESC DIccioHAnmo ENCICLOPDICO DE LA MASONERA -- 274 de Gran Maestro, es el primer introductory y primer cor- ruptor de la Francmasonera en Francia, pagase con la cabeza., su crime de lesa humanidad. Tal es, en definitive, el glorioso y democrtico origen del famoso Rito Escocs, que tan pacos masones conocen fondo, y que sin que se- pan por qu, califican de Antiguo y Aceptado. El mayor nimero de los que entran former parte de la Masonera Escocesa con ideas filosficas, se dejan engaar por esos pomposos nombres de Antiguo y Aceptado, que no falta quien hace resonar con much nfasis en los oidos de los nefi- tos; y como en realidad no se puede conocer la Masonera sino despues de former parte de ella, acptanse, sin prvio exmen, aquellos calificativos, por decirlo as, beneficio de inventario. Resptase prior el pabellon que cubre la Masonera, creyendo de buena f que esas tres palabras: "Escocs Antiguo y Aceptado," son oficialmente, una espe- cie de prueba garanta, de que el Rito Escocs posee solo, la pura y primitive doctrine que di nacimiento la Insti- tucion. Las otras ramas de la Masonera no se presentan al espritu, mas que como cismas alimentados por el error y la mentira. Pero qu decepcion, cuando en lugar de las vivificadoras aguas de la ciencia y de la filosofia, no se en- cuentra en el Escocismo otra cosa que un charco fango- so, cuyas aguas, agitadas de continue por los vientos del orgullo, no dejan penetrar el mas insignificant reflejo de luz! En aquel rincon de tinieblas ignorancia, no hay vida, mas que para las pequeas pasiones, y las vanidades tontas de aquellos que continan en l, por las solas miras de inters. All es en donde se hunden cada dia mas, cha- puceando su gusto y por su gusto, puesto que entire tan- to fango y tanto delirio y tanta extravagancia, es impo- sible encontrar rastro alguno de ciencia y filosofia. Y no se diga por alguien que todas estas afirmaciones son exa- geradas, porque vamos demostrar ms adelante, que todo lo dicho, est aun muy por debajo de la verdad. Al ver la extremada ligereza con que el Escocismo admite nuevos miembros entire sus adeptos, no hay que extraarse de que esas admisiones iniciaciones, todo trance, lleven las Logias, los mas heterogneos inconvenientes elements, los mas discordantes y los mas anti-masnicos que puedan imaginarse. Hemos sido, pues, como se demostrar mas adelante, asaz parcos y muy inferiores de lo que debamos ser, para llegar al nivel de la realidad de los hechos. Para desvanecer cuantas dudas pudieran subsistir todava este respect, cederemos la palabra uno de los mas populares historiadores de la Orden, el honorable Clavel, cuyo testi- monio no puede ser sospechoso, toda vez que, durante lar- go tiempo, ha sido Venerable de una Logia del llamado Rito Escocs Antiguo y Aceptado. Leyendo sus palabras, se ver que la simona Masnica es cosa antigua entire los hermanos del Escocismo, y que, por mas que sea algo sor- prendente, en los comienzos del siglo actual, altos digna- tatios del Rito han osado distraer en provecho propio, con- siderables sumas procedentes de la caja de la Orden. Cla- vel nos descubre, con tal motivo, el hecho capital de que esta vergonzosa simona ha sido en otro tiempo la causa que ha impedido los Jefes del Rito Escocs unirse al Gran Oriente de Francia. Pero dejemos hablar al H.'. Clavel: "Los traficantes de la Masonera, quienes la series de los 33 grados del Rito Antiguo y Aceptado, abria una mina tan abundante de beneficios ilcitos, habian sido de los mas fogosos en precipitar la ruptura del concordato (con el Gr.'. Oriente), esperando que, merced la anarqua, con- secuencia de aquella, podran entregarse impunemente al ramo de industrial que esplotaban. Por de pronto, se cir- cunscribieron las recepciones clandestinas en los mas al- tos grados del Escocismo; pero, poco poco fueron atre- vindose, y el Hermano Abraham, entire otros, lleg hasta expedir por su propia autoridad, cartas constitutivas de Captulos, Consejos, Consistorios, etc., etc... El mismo con- de de Grasse, se asegura que hacia oficio, de la Masonera. Se le ha acusado especialmente de haber entregado un hermano llamado Hannecart-Antoine, en 1809, y antes de que parties para el ejrcito de Espaa, gran nmero de diplomas en blanco, provistos con su firma, para que aquel hermano los aprovechase pecuniariamente, repartindose entire ambos el product de la venta. Lo que es innegable es, que si no ha intervenido en tan vergonzosos enjuagues, los ha conocido al menos, tolerndolos en su principio. Los hombres de que se rode el hermano de la Motta, para fundar el Supremo Consejo de Nueva York, eran tambien unos traficantes en Masonera, pero mas hbiles y menos cnicos que Cerneau. Completaron su nmero con algunas personas honradas, cuyos nombres les servan de capa y recomendacion; al abrigo de stos, distraan en-provecho propio, los products de las iniciaciones y ttulos, y para no tener que rendir cuentas, no convocaban al Supremo Consejo, mas que en raras ocasiones y con intervalos irre- gulares, y aun esto tan solo para proceder iniciaciones, cuyo ceremonial, expresamente dilatado, llenaba todas las horas de session y no dejaba tiempo para otra cosa. En di- versas ocasiones clamaron contra su competitor Cerneau. acusndole de abusar de la confianza delos masons, confi- rindoles un falso Escoeismo inventado por l y de apro- piarse las cantidades resultantes de la colacion de grados y de la expedition de diplomas. En Junio del ao 1816, la disidencia escocesa reuni en Paris, en el local del Prado, plaza del Palacio de Justicia, una Asamblea General, para celebrar la fiesta de San Juan inaugurar los bustos de Luis XVIII y del conde de Artois. Mas, pocos dias despues, el Gr.-. Comendador vise obligado dejarParis, para huir de los procedimientos que contra l se dirigian, con motivo deno satisfacer una letra de cambio. Durante su ausencia cambi la march de las cosas. Sobrevino un trfico ver- gonzoso de la Masonera, y tuvieron efecto iniciaciones es- candalosas. Se le dirigieron con tal motivo, las- mas vivas reclamaciones, y escribi para que cesara este desrden, pero ningun caso se hizo de sus exhortaciones. y los direc- tores de la trama trataron hasta de excluirlo del Supremo Consejo, siendo el hermano de Maghellen el jefe de este complot. Instruido de los proyectos que se tramaban con- tra l, el jefe del Escocismo trat de conjurarlos. Desde el fondo de su retiro, en Versalles, tom enrgicas medidas contra sus adversaries; en 28 de Julio de 1817, encarg al general de Fernig, secretario del Santo Imperio, y nueve Inspectores Generales, "la preparation de un expurgo se- "vero y la formacion de un cuadro de los oficiales superio- "res y dems miembros de altos grados que, por su morali- "dad, sus virtudes y su position social, fuesen capaces de "honrar el Arte Real y de realzar el estandarte del Esco- "cismo;" decret que todos los acuerdos tomados sin su in- tervencion, desde 1. Julio de 1816, eran considerados nulos; que la Asamblea cuyo frente se hallaba el hermano de Ma- ghellen, y que se titulaba Supremo Consejo para Amrica, quedaba disuelta; resign indefinidamente y sin limits, du- rante su ausencia, sus poderes en el general de Fernig, para que ste tomara, junto con los miembros de su Consejo, las medidas mas oportunas para restablecer el rden; cuyas decisions todas, las di conocer por medio de un mani- fiesto que fu impreso y repartido. La fraccion del Supre- mo Consejo, contra la cual iba dirigido este manifesto. comprenda la autoridad que revestia aun el nombre del conde de Grasse; conoca el celo y las poderosas relaciones del general Fernig, como tambien la consideration de que estaba rodeado; temia con razon el final de una lucha que habria de emprender contra el Supremo Consejo del que, de hecho, aquel era el jefe; en su consecuencia, aquella camarilla pens en llegar un arreglo, y para conseguirlo con mayor seguridad, ide traer l, al conde de Grasse por medio de un favor. As fu que pag la deuda por la cual ste era perseguido, y le remiti satisfecha la letra de cambio mencionada. Vencido por este proceder, eljefe del Rito, se acerc los hermanos que hatia anatematizado, y revoc los poderes qus habia conferido al general Fernig." Mas adelante, dice el mismo historiador lo siguiente: "Entre otros cargos articulados contra el conde de Grasse. se le reprochaba de haberse desposedo en 1806 de sus funcio- nes de Gran Comendador en favor del prncipe Cambac- res; de haberse hecho entregar posteriormente algunos di- plomas firmados en blanco y cuyo empleo jams fu cono- cido; de haberconstituido un Consistorio del grado 32.0 en Rouen, apropindose para s el precio de las constitucio- nes, y, por ltimo, de haber establecido un Supremo Con- sejo cismtico, rival del legtimo. Citado para esta audien- cia, el conde de Grasse tuvo bien no comparecer. Nom- brsele un defensor de oficio, que fu el hermano Mangeot quien cumpli con conciencia su deber, pero, por grande que fuese su habilidad, el Supremo Consejo, prvia delibe- racion, declar al conde de Grasse, caducado y destituido de su ttulo de Gran Comendador, le legrad de su carc- ter de mason, le seal como traidor la Orden, prohibile perptuamente la entrada en las Logias Escocesas, y man- d que esta sentencia se imprimiese en cantidad de 7000 ejemplares, y se distribuyese los talleres de Francia y del extranjero, facilitndose, adems, cuantas personas la solicitaran. Aun cuando las faltas imputadas al conde de Grasse hubiesen sido irrefragablemente probadas (y dista- ban much de serlo), tal sentencia violaba las reglas y leyes masnicas, y era, antes que un acto de justicia, la sancion de una venganza personal. Esto fu causa de que