PULSO DE PUERTO RICO ciclo jbaro que se afirma con la publicacin de Indice en 1929 y que tantas obras de ambiente e interpretacin jbara ha dejado. Me hubiera gustado, asimismo, un examen ms intenso de la actitud crtica de Alonso frente a la tradicin; ms resalte de la actitud social de Alonso que de su filiacin literaria, de su falta de dogmatismo pedaggico, a pesar de que es el fuerte de su obra; de la clara distincin que hace Alonso del tipo puertorriqueo fren- te al tipo europeo, singularizando ese su sentido de hospitalidad -que hace de "cada casa una posada gra- tuita"- y sus habilidades de jinete, de pendenciero y de amigo de juergas; del sentido puertorriqueo que hay en la evocacin de Fr. Angel de la Concepcin Vzquez, Padre Gimnez, Padre Rufo, de las afectuosas referencias a Baldorioty, R. Cordero, Acosta y Tapia; de la creacin de esos tipos como Perico Paciencia, Agapito Avellaneda, Don Felipe, el jbaro en la capi- tal, etc.; de su particular modo de hacer estilo con races en ese modo particular de ser el jbaro: formas y expresin veladas y pleonsticas, la sentencia envuelta en parbolas, smbolos y figures, el equvoco aparente- mente inocuo, la propensin al aspaviento y a la hipr- bole, sin separarse de la realidad, la gracia zumbona, el respeto a ciertos valores de la tradicin; de la dife- rencia entire el primer y segundo tomo, porque si el segundo carece de la espontaneidad juvenile del primero, tiene ms valor artstico, aunque sigue present esa ma- nera escurridiza y matrera del jbaro; de la infrahisto- ria puertorriquea de 1826 a 1883 -aspiraciones pol-