ENRIQUE A. LAGUERRE previvas ---como yo deca-) por aquellos cuentos y poesas sobre pjaros y animals y por sus ilustraciones a color. Manuel Fernndez Juncos tena una admirable intui- cin pedaggica, aunque ya est algo pasado de moda y aunque sus libros no siempre satisfagan desde un punto de vista ideolgico. Posiblemente a m, entonces un nio campesino, me impresionaron por ser yo un cam- pesino y por haber vivido en un ambiente bastante li- mitado. No s qu impresin dejaron los libros de Fer- nndez Juncos en los nios urbanos. Si yo fuera a escribir libros de lectura para nios, no pretendera escribirlos en una hora por aquello de la es- pontaneidad y la sencillez. Me impondra de las tcnicas y mtodos -tan a la mano hoy da-, tendra en cuenta los intereses y la manera de hablar --sintaxis, fonologa y vocabulario de los nios-, acudira a las fuentes que me ofrece la naturaleza y con claro sentido de conviven- cia, recogera, para llevar al libro, los elements realistas y los exaltara, con fines de ir encaminando a los nios hacia una mejor comprensin de sus propios problems y los de sus vecinos y los de los vecinos de los vecinos. Desde muy temprana edad deben los series humans ir comprendiendo que convivir est un poco ms all de vivir.