7 pueda cubrir las necesidades de la plant; dependiendo entonces el 6xito de la fertilizaci6n, del conocimiento exact de ambas cantidades y relaciones. Con respect a las necesidades de fertilizaci6n en el frifol, Fassbender (11) seiiala que son altos y que en muchos casos la fertilidad natural de los suelos en que se cultivar -no es sufficient para cubrir sus necesidades, recurri6ndose por ello a la aplicaci6n de fertilizantes. Este mismo autor agrega, que las grades variaciones en las dosis 6ptimas de fertilizaci6n que se aprecian al revisar la literature, se debe a la gran variabilidad de la fertilidad natural de los suelos y a otras propiedades intrinsecas en donde se han conducido los experiments. Tal variabilidad es ilustrada por Baz6n (6) con las dosificaciones de N, P205 y K20 recomendadas en cada uno de los passes Centroamericanos, como resultado de experiences locales realizadas entre 1960 y 1970, cuyo rango de variaci6n se anotaporpat s y nutrimiento en el cuadro siguiente: Dosificaci6n Recomendada (KglHa) Pa i's N P205 K20 Costa Rica 12-100 19-150 0-45 Nicaragua 12- 45 24- 90 0-12 El Salvador 20- 45 20- 90 0-45 Honduras 45 90 .45 En Guatemala la experience sobre el particular tamWn es indicative de que los requerimientos de fertilizaci6n en el frijol son variables en junci6n de la localidad en que han tomato lugar las pruebas. Seg tn el informed rendidoo ante la Reuni6n T6cnica sobre Programaci6n de Investigaci6n y Extensi6n en Frijol Celebrada en Turrialba, Costa Rica (17), en suelos del Valle Central de Guatemala se encontr6, durante 1956, que 35 Kg de N y 36 Kg