GENERAL PAULO EMILIO ESCOBAO arriba citada, ordenndole que le hiciera entrega de lo que hubiera de ferrocarril a una compaa inglesa. La guerra civil del mismo ao interrumpi el cumplimiento de esta disposi- cin y toda otra empresa. En 1879 el gobierno compra a los accionistas de la compa- fia del ferrocarril del Carare todos sus derechos y bienes, con una prdida de $ 300.00C para el tesoro national. En cambio pudo utilizar los rieles y el material rodante en otros ferrocarriles del estado. Debe observarse que, las tentativas de construccin hechas hasta entonces, parece que partan del ro Carare hacia Bogot, y no de esta ciudad central hacia el ro, lo que desde luego es un error muy costoso, puesto que los rieles, locomotoras y dems material rodante, haba que llevarlos a lomo de bes- tias y aun a hombros de peones, mientras que los buques flu- viales pueden subir por el ro Magdalena y su afluente el Cara- re, hasta Puerto Aquileo, para descargar all el material, que debera prolongar sistemticamente la lnea frrea hacia el in- terior. En 1882 los extranjeros Brown & Rodgers celebraron dos contratos con el Estado de Cundinamarca, para construir la sec- cin del ferrocarril Bogot-Zipaquir, resultando estos sefores insolventes. En 1331 los seores Juan M. Fonnegra y Alberto Urdaneta contrataron la construccin del mismo trozo de ferrocarril, con privilegios especiales, hasta por 45 aos y tambin fracasaron. En 1885 estalla la guerra civil colombiana; los trabajos se suspenden y en el ao siguiente- 1886- los concesionarios piden una prrroga al gobierno del departamento (antes esta- do) de Cundinamarca. Esta entidad contest que, habiendo des- aparecido el Estado de Cundinamarca, el departamento careca de facultad legal para resolver lo pedido. Los concesionarios apelan de esta resolucin ante el gobierno national, el que, des- pus de discusiones y consultas, les concede la prrroga. En 1889 el concesionario Fonnegra quien, por muerte de suso- cio Urdaneta, haba adquirido legalmente los derechos que a ste correspondan, solicit otra prrroga del gobierno national; se le concede y adelanta los trabajos de construccin, pero poco des pus se ve obligado a suspenderlos por la resistencia que le opo- nen los dueos de terrenos por donde deba pasar la lnea frrea. En 1890 el mismo empresario Fonnegra logra organizer una compaa national constructora del ferrocarril, la que solicita del 36