La Babel que por razones puramente de orden filol6gico
se habia formado en un ambiente natural grandiose, en medio de
una naturaleza virgen, en una region cuajada de riquezas, se vino
abajo cuando el espaiiol, con la divina lengua castellana unific6' el
medio de darse a entender por unos y por otros.
 Y hoy en dia, al examiner los avances que la conquista hizo en
el medio social, las ventajas que aport6 a la humanidad, los bene-
ficios que proporcion6 a la nacionalizaci6n de una region, encon-
tramos que asi como puede leerse a un Pepe Batres national por
un indigena, que se haya adaptado a la cultural que se le ofreci6,
puede tambi6n apreciar el inagotable product de un siglo de oro
castellano, que ya es decir much.
 Tradici6n y lenguaje, aportaron el material necesario para que
la evoluci6n del tiempo y de la sociedad produjeran aquel vinculo
llamado nacionalidad.
 M AW

 -No me negara usted decia un americano a un espafiol -,
que la actuaci6n de sus paisanos en los moments de la conquista
es sanguinaria y rapaz.
 -Estoy de acuerdo contest el interpelado. Agreg6: -- Que
conquista conoce usted que no revista las caracteristicas de ser de
terror y sanguinaria? HAgame el favor de decirme usted 4qu6 pre-
fiere, el yanaconazgo, la mita y la encomienda que la Espafia, a
quien se titula barbara y fanAtica, impuso en parte de la America,
o el exterminio sistemAtico que en el norte se llev6 a cabo contra el
pobre indigena, a quien a semejanza de fiera se le cazaba y se le
daba muerte, como at mAs vil animal? Digame usted, y despues es-
taremos de acuerdo, 4conoce las famosas leyes azules de los cuA-
queros con relaci6n a los indios y si alguna vez ha tenido cuidado
de compararlas con las que el Consejo de Indias dictaba para la
America espafiola? Es cierto que un Hernan Cortes, un Pedrarias,
un Pizarro, un Alvarado, azotaron al indigena y le dieron muerte
sin cuartel, six importarles el rango; recordamos a Cuauhtemoc, Ata-
hualpa, Oxib-Quiej y Belejep-Tzi, pero tal hecho fu6 fnicamente en
ciertos moments. Mientras que el ingles en el norte y el alemAn
en Venezuela, muestran que el carActer y la conduct de los hom-
bres del moment, no eran de una raza, sino que obedecian al grado
de cultural general que imperaba en el viejo mundo. Cabalmente eso
oblig6 a exclamar al poeta:
 Culpas fueron del tiempo y no de Espaiia...