166 CUENTOS Y NABRACITONES Un incitante perfume de jardfn y de floresta halagaban los sentidos con amorosa insistencia, que ain en las horas de calma es, en esta zona espl6ndida, cada plant un pebetero y cada flor un poema que en generoso tribute rinde Flora a Citerea. ** Por un angosto sendero con honors de vereda, que sube en tortuosos giros hacia el lomo de una sierra, un jibaro (1) repechaba con plant firme y ligera. Era Fernando Collores, mozo alegre, talla esbelta, tez blanca y descolorida, grandes ojos, barba negra, aire galAn, busto erguido, rostro de lines correctas, y expresi6n movible y vaga entire sumisa y en6rgica. Siempre y por igual propicio a las rifias y a las fiestas, lo mismo improvisa un baile que lo acaba 6 lo dispersa. Cantador a lo adivino con asomos de poeta, (i-ampesino puertorriauefio de poca 6 ninguna instruccidn' v