CUENTOS Y NARRACIONES -Todo eso que dices se arregla y se re- suelve con esta varita de virtud. Y apretaba con su callosa diestra la vara de medir paredes, en la que brillaban mu- chas cabezas de clavos. Mito no pudo dormir aquella noche.... Segiin aumentaban los temores y las an- gustias del desgraciado estudiante, crecian en 61 el amor y el apego hacia su buena ma- dre, inico ser que le comprendia, que com- partia sus penas y que hubiera sido capaz de dar por 61 su propia vida. Durante las horas de fiebre que habian seguido a la cruel paliza sufrida por Mito, hacia ya cerca de un afio, su madre le habia colgado del cuello un escapulario de la Vir- geri del Carmen, de la cual era muy devota. Tenia much fe en la eficacia de aquella es- pecie de reliquia, que ella solia llevar sobre su coraz6n, y encarg6 a su hijo que la lle- vara siempre consigo, como un talisman pro- tector. Y aunque Mito no se habia distin- + guido nunca por el fervor de sus creencias religiosas, recibi6 y conserve cuidadosamen- te aquel signo de devoci6n, que le recordaba el mas tierno y sublime de los amores. Pa- reciale que en aquel escapulario llevaba con- sigo algo esencial y extramundano de aque- lla madre que habia sido y era en el mundo su inico bien. En los moments de gran angustia y abatimiento a que solia entregarse Mito en