DOCUMENT NUM 5 MENSAJE DEL PRESIDENT DE LA REPUBLICAN HONORABLE CONGRESS NATIONAL (1852) En mi anterior Mensaje del da 9 de Marzo dije que profundas meditaciones sobre las reforms y mejoras que pide la adminis- tracin de Justicia, haban impreso en mi alma la prctica de los sucesos durante mi Administracin, y la visit que hice en el mes de Octubre a las Provincias del Cibao llevando en mi compafial al Seor Toms Bobadilla, Presidente de la Suprema Corte de Justicia, etc., etc., me permiti ver grandes irregularidades que me fuerzan a presentarlas al Congreso por un Mensaje especial. Una ley sobre organizacin judicial, tal como la que est en vigor, es inconvenient, y aunque se reformase despus siempre sirve, cuando menos, de pretexto para trabar la march de los ne- gocios, y para que los que deben distribuir justicia con impar- cialidad y rectitud no dejen de encontrar razones evasivas para frustrar las esperanzas de sus comitentes, y las de las parties que la reclaman. En una de sus disposiciones dice la ley, que el Juez que falta a tres audiencias consecutivas se dar por dimitido, y esto ha oca- sionado que en algunas Provincias se haya paralizado la adminis- tracin de justicia y cerrado algunos tribunales con detrimento de los particulares y de la conveniencia pblica. Muchos jueces, sin causa justificada, han hecho como una atalaya que puesta al frente del campo del enemigo abandon su puesto dejando com- prometidos el honor, el inters y la seguridad de sus compaeros. El Ejecutivo declare oportunamente que ningn Juez poda sepa- rarse de su destino sin ser reemplazado previamente; pero como no pudo imponer ninguna sancin penal, se han hecho ilusorias sus medidas, y la confianza que los elegidos de la Nacin pusieron en tales sujetos.