CONGRESS NATIONAL 1852 caudacin del impuesto sobre las mercaderas extranjeras: ambas medidas dieron el resultado que me promet. Tena la convic- cin de que deban aprovecharse los das de paz para asegurar a la Repblica los recursos indispensables para su conservacin, y aquella situacin que debe anhelarse siempre para emprender reforms de grande importancia: la de no verse urgidos por ne- cesidades imperiosas. Creo haber tenido la fortune de acertar, porque a pesar de los enormes gastos que nos ocasion el mo- vimiento de los enemigos, el Ministerio no tuvo necesidad de emitir ms papel, y qued sin efecto la autorizacin que, en previsin de lo que pudiera suceder durante mi ausencia hacia las fronteras, le hice para proveerse de recursos. Hubo de hallarlos en los resultados de las medidas tomadas en tiempo; y hoy mis- mo, a pesar de los gastos imprevistos de un ejrcito de ms de ocho mil hombres, el Tesoro se halla en el estado floreciente que acabo de manifestaros, y podis sin riesgos de repentina escasez, ocuparos de la reform de la Hacienda Nacional. El emprstito que order< soliqitar el Congreso para la amortizacin del papel moneda u otro empleo de grande im- portancia, aunque lleg casi al extreme de un ajuste, habindome parecido onerosas algunas de las condiciones que exigan los prestamistas, rehus aceptarlo, atendiendo a lo que han variado las circunstancias, y a que, concluida la guerra, nuestros propios recursos bastarn para satisfacer nuestras necesidades. Cuando ms adelante, por virtud de atinadas leyes y de ms arraigada confianza en nuestra independencia, se conozcan nuestros abun- dantes medios, nos sobrarn capitals para cualquiera empresa que tenga en mira un progress precoz: podremos entonces dictar, no recibir, las condiciones al hacer uso de nuestro crdito. Yo me propongo despus del nuevo arreglo que se d a nuestra Ha- cienda, disponer en parte, segn vuestra autorizacin, del que gozar la Repblica, y hallar sin dificultad proposiciones acep- tables. Pero el estado actual de prosperidad del Tesoro se debe a los esfuerzos del patriotism, no a un sistema de rentas bien es- tablecido. Los empleados sirven casi sin remuneracin, y los