JUAN LUIS MARTIN en aquel movimiento, estaban decididos a salir de China a costa de cualquier sacrifido, induso el de la libertad. La generalidad de estos intrusos se encontraba establecida, como en el present, en las cercanias de los limits de la provincia de Fukien, en la region bafiada por el rio Chi-Kong, con centro mercantil en Suatau. Tambien son considerados de raza a-china, o sea, de procedencia diferente a la de los restantes habitantes del sur de China, los fuk-lo, Uamados por algunos jo-lo, o la antigua gente alegre, que ocupan las dos bandas de la linea divisoria entire las provincias de Fukien y Kwangtung. Contaban entire los primeros chinos que vinieron a Cuba y que, sin duda, se ban mezclado con la poblaci6n cubana. No solamente por cuestiones de raza, sino tambien por motives de idioma, vivian aislados y con mayor facilidad aprendian el castellano que el cantons. Formaron tambi6n parte de las tropas de choque de los tai-ping y entraron en las huestes mambisas, ya desde la primera guerra. Los primeros entraron en Cuba en el afio 1847; procedian de un distrito situado al Nordeste de la ciudad de Cant6n. En igual consideraci6n tienese en la provincial de Cant6n a los Tan Min, o n6madas fluviales, de los cuales vinieron algunos. Las rivalidades entire las diferentes colectividades chinas en los pri- meros afios de la contrataci6n eran, pues, de caricter regionalista. Todos los chinos, except algunos que vinieron de Fu-Chau, proce- dian, en Cuba, de la provincia de Cant6n. Nos proponemos en estas notas hacer relaci6n de sus expresiones principles, ya que por el caricter especial de la formaci6n 6tnica de esa region de China no habia rasgos comunes entire los grupos emigrados, ni aim en el lenguaje. Nos vamos a referir ahora exclusivamente a los kok-ka o kak-ka, como diferentes de los chau-cbau o fuk-lo a que antes aludimos. Por su character, son sobrios, integros, de una probidad proverbial, aunque en algunas provindas de China se les exduye, como se hace en la India con los individuos de las ilamadas tribus errantes. Los primeros Ilegaron a La Habana en la fragata "Oquendo", proce- dentes del puerto de Amoy, en la provinda de Fu-Kien, el 3 de junio de 1847, tras de seis meses justos de viaje; nueve dias despues, llegaban otros en la fragata Dupec of Argile. Julian de Zulueta y Joaquin de Arrieta eran los consignatarios de esa expedici6n de esclavos amarillos, tan vergonzosa como las de africanos. Los contratos firmados eran por ocho afios. Durante veinte afios mis habria de durar el trifico, vinen- do contratados de todas las regions de la provinda de Cant6n, princi- palmente del famoso delta, que, desintegrado en miles de isletas, se encuentra al sur de la famosa ciudad de Kwong-Chau, capital de la pro- vincia. Cuando el trifico pas6 de manos de los ingleses de Amoy a los portugueses de Macau, dejaron de venir en masa a Cuba los kok-ka, cediendo el paso a los pun-ti, o cantoneses, legitimos chinos. Comenz6 entonces a crearse distingos entire chinos cbau-chau, o fuk-lo de Cant6n, de Manila (colonizadores de las Filipinas) y el amoyano.