JUAN LUIS MARTIN sus factors, han podido conservarse permanentemente, a poca distancia de zonas antiquisimas de civilizaci6n, pueblos animAlides, de primitive cultural, encajonados entire altisimas montafias y viviendo en valles bajos e insalubres. La impotencia del hombre, frente a fuerzas naturales casi invencibles, ha creado para casi todo el Continente esa actitud fatalista, que es casi como un rasgo comfin de sus civilizacones. El influjo del nomadismo, por otra parte, ha dado. permanencia a las normas del cau- dillaje, desp6ticas y patriarcales, que hallamos tambibn, impuestas por otros motives, en la vida sedentaria de los agricultores y los artesanos. Por esta causa, la configuraci6n political de los pueblos asifticos ha ten- dido haca la autocracia, mientras que en Europa se encamina hacia la democracia. En Europa, la civilizaci6n parti6 de una zona y se comu- cic6 a las restantes; en el continent europeo, la cultural act6a como los liquidos en los vasos comunicantes. En Asia, tiene various puntos de in- cepci6n y se detiene, en su tipo especifico, cada civilization, dentro de la muralla del vaso propio, de las montafias. Por eso,' falta en la cul- tura, esa unidad continental que encontramos en Europa y que se re- f;eja en la civilizaci6n europea. Europa se toma como el continent de la civilizaci6n individualista y democratic; Asia, del fatalismo en religion, el patriarcalismo en la or- ganizaci6n centuriada y el despotismo en political. Africa fue, durante muchos siglos, el continent misterioso, rico, sin posibilidades su po- blaci6n de entrar en las grandes corrientes universales. Su nombre se limitaba al principio a la descripci6n de una faia de su litoral medite- rrineo, a las cercanias de Cartago, en la nomenclatura geografica de los romanos. Luego abraz6 a todo el Continente. En'su historic no ha habido unidad. El centro y el sur han estado separados virtualmente del grandiose process de la dvilizaci6n en el norte y el este, en la porci6n contigua al mar Rojo. Por eso, se ha aceptado, con dertas restricciones, la designaci6n de "Continente Cultural y Econ6mico Eurafrasiatico", todo ese mundo que comprende la costa norte africana, el Cercano Oriente (encerrando a todos los paises de origen persa al este) y Eurona, region del mundo en que se ha mantenido, durante muchisimos siglos, la interdependencia. El resto era la terra incdgnita, de la que se tenian vagas noticias, entire los europeos al menos, puesto que entire los Arabes bahia un conocimiento mIs extenso, particularmente de la region del Indico, desde antes de producirre las grandes i.vasiones agarenas que se derramaron por la costa mediterrinea hasta rais alli del estrecho de Gibraltar. El mundo guineo no comenz6 a ser levemente conocido sino en visperas del descubrimiento de Amnrica. ;A que se debia este abandon, esa pcca preocupaci6n hacia lo que Africa representaba? Fuera de otras y poderosas razones muy abundantes, la misma configu- raci6n del Continente Africano contribuv6 a que no se acometiese, sino casi en nuestros mismos dias, la sistematica exploraci6 y conquista de todo ese mundo. Hallamos, en primer lugar, que el litoral africano es poco acciden- tado; faltan las grandes bahias, las peninsulas extensas, las islas propias para las recaladas y operaciones de aguada de los buques. La masa