84 COLECC6N HIST6RICA CUBANA Y AMERICANA "Yen Nardso, que el cielo te envia a sacarnos del cruel Purgatorio, pues es barto evidence y notorio que ai se ven los de la patria mia. Ven, que el martirio de la suerte inpia no podemos sufrir los cubanos, ni a esos torpes e infames tiranos, el yugo de su negra alevosia". Narciso L6pez vino, una y otra vez, a la tierra cubana para liber- tar a sus hijos del despotismo espafiol pero, como ya apuntamos, ain no se habia formado la conciencia revolucionaria indispensable para el .xito de estos generosos empefios patri6ticos del precursor y protomirtir de nuestras libertades. En su declaraci6n ante el tribunal que lo juzg6 en Nueva Orleans, a virtud de la proclama del president Fillmore, condenando las actividades revolucionarias por L6pez desarrolladas en tierra norte- americana con motive de la expedici6n que arib6 a Cirdenas, Nar- ciso L6pez express: "-Mi delito es haber tratado de Jibertar a la oprimida Cuba. Si por esto he de ser perseguido, estoy disquesto a que me persigan cuando quieran. Hoy y luego, hasta el l6timo moment de mi vida, soy y ser6 criminal en este sentido". Si cometi6 errors, ellos quedan glorificados per su consagrad6n desinteresada, absolute y nobilisima a la causa de la independencia de Cuba; por su fe en el triunfo definitive del ideal libertador, plas- mada en aquella frase profeiica que pronunci6 en el tablado del patibulo: "Mi muerre no cambiari los destinos de Cuba", y por se amor sin limits a la que adopt espontineamente por patna de sus mas grandes amores, segnf estas palabras finales que salieron de sus labios: "-Compatriotas, hermanos: No vine a las playas de Cuba a traer males, sino bienes, a sus habitantes. Mi empresa ha sido desgracia- da... Voluntariamente me he entregado al gobierno espafiol para salvar la vida de los mios... Ya s61o me queda rogaros... que me perdoneis los que he podido ofender, asi como de todo coraz6n hago yo al que me haya ofendido. Compatriotas y hermanos: iadi6s! ;Adi6s, mi Cuba querida!" * Mientras ond&e en tierra cubana la bandera de Narciso L6pez, simbolo de la nacionalidad, su nombre sera venerado per los cuba- nos de todos los tiempos y ella proclamari perennemente, en todas las tierras y en todos los mares, el heroism y el martirio de este preclaro venezolano que ofrend6 su vida por Cuba Libre y nos di6 la bandera de la Patia.