24 COLECCI6N HIST6ICA CUBANA Y AMERICANA En cuanto a la bandera o banderas conquistadas a los ingleses en 1797, a que se alude en el phrrafo que hemos transcrito de Marin Villafuerte, el mismo historiador da cuenta de que gobernando a Trinidad el teniente colonel de infanteria don Luis Alejandro Basse- court, dos bergantines y una fragata de guerra ingleses, a esar de los cafiones del castillo de San Pedro, penetraron en la bahia de Casilda, iniciando las hostilidades con bito, pues se apoderaron de un corsario casildeio y un barco frances, pero Bassecourt reuni6 las militias, atac6 a los ingleses, impidiendo so desembarco y yndo al abordaje de los barcos, lo que produjo que los ingleses reembar- caran su gente precipitadamente, "dejando en powder de los triunfan- tes trinitarios amas, pertrechos y valiosos trofeos". Esa bandera fue remitida por Bassecourt al capital general de la Isla, conde de Santa Clara, para que la enviase a la Corte, pero dicha autoridad dispuso, que la conservase la dudad de Trinidad. segin aparece de la comunicaci6n siguiente leida en cabildo de 9 de sep- tiembre de 1797, y de la que obtuvo en 1949 copia certificada, que nos ha facilitado, nuestro companero Manuel L Mesa Rodriguez: "Siendo el dia muy aventurado la Remisi6n a la Corte con motivo de la Guerra de la Bandera Inglesa que ousted me remiti6, que fue aprehendida en la retirada en ese Puerto a estos buques de esta Naci6n el dia 21 de julio anterior, he determinado devolverla a Ud. como lo hago, para que hadendole present a ese Ayuntamiento, se pueda poner en la Iglesia Mayor de esa Villa, en memorial de aquella acd6n, y que la tengan a la vista esos habitantes, an monu- mento debido a so distinguido m&rito, en defense de las Armas del Rey y, de su Patria. Dios Grc. A. Vm. Ms. As. Habana 31 de agosto det 1797. Conde de Santa Clad'. De esta bandera y otros trofeos colocados en la Iglesia Parroquial de Trinidad, afirma Marin Villafuerte (p. 93), "conviene decr une fueron victims de la incuria de los trinitarios y de la destrmcc6n del tiempo". Pero, fue tal la nombradia que por sa heroismo en rechazar a los enemigos alcanz Trinidad, que al demandar se le concediera escudo de anmas, en dste se hicieron aparecer, ademis del jigiie bajo el cual se celebr6 la primer misa, y otros simbolos rememorativos de hechos hist6ricos, los caiones y banderas apresados a los ingleses. Asi, la bandera inglesa, aunque no ya como esefia official de esta Isla ni serial de dominion sobre la misma, sino, poe el contrario, rememorando heroics victorias alcanzadas sobre la Gran Bretasa, subsiste en nuestros dias, orlando el escudo de la ciudad de Trinidad, en la provincia de Las Villas. Bueno es recorder que jams, durante esos meses de dominaci6n inglesa, los habitantes de La Habana, ya fueran peninsulares o naci- dos en la Isla, se consideration sfbditos britnicos ni miraron con buenos ojos la bandera inglesa, sino que, como espafioles, amantes