LA ORATORIA EN CUBA Espartaco, cansado de injuries y de ofensas, corre a la cam- piia cubana, siempre verde y fresea como era su esperanza, y en los Mangos de BaraguA, erguido en el caballo, el machete en lo alto, en cuya hoja rompianse los rayos del sol cual si fue- ran los de la gloria para nimbarlo como una figure homerica, consigna contra el Pacto su viril protest, que en eco formida- ble se extiende por el mundo y queda en el libro de la historic con los honors de un monument levantado por el mis her- moso patriotism. Las brumas de la fatalidad cubrian ya el horizonte, y ese acto de Maceo no fu6 sino el cirdeno e intense relAmpago que denunciara la tempestad que aun existia en no pocos espiritus, y que dejara ver un instant, como entire luces funerarias, las tristes ruinas en que yacia la patria esclava. Vino luego el 6xodo de los que, con sus families, deseaban un ambiente mis generoso, mis tranquilo, mis puro, mis li- bre, donde llorar las angustias de la patria o desesperar de su terrible sino. He creido siempre, por asociaci6n de ideas, que habia una estrecha similitud entire el aturdimiento y la deso- laci6n en que el suplicio de Jesis dej6 a la grey cristiana, y el aturdimiento y la desolaci6n asimismo que embargan a los verdaderos cubanos, terminada la guerra del 68. Y c6mo no, sefiores, si agonizaba exangdie la patria, crucifieada en el du- ro madero de la esclavitud y la expoliaci6n, sin tener siquiera a d6nde volver sus desorbitados ojos, ya que tambi6n el cielo con su negrura political, se negaba a concederle las claridades de la esperanza! Y habia algo todavia en que tal semejanza se acentuaba: la peregrinaci6n religiosa de los ap6stoles cristianos, iluminados en la fe mesiAnica, por todo el orbe conocido enton- ces; la peregrinaci6n political de los mis fuertes y generosos patriots cubanos, iluminados de la fe en lo porvenir, por todos los puntos de la Am6rica;--los unos, con el coraz6n en Jesus y la mente en el reino de los cielos; los otros, con el coraz6n en Cuba y la mente en el establecimiento de una republica libre y soberana, y todos, todos movidos de la energia, de la voluntad esoterica, misteriosa, incontrastable, que lleva a la ejecuci6n de una obra a pesar de que al final de ella se eneuentren las pal- mas del martirin. De seguro que al llegar aqui, de vuestros corazones se avi- va el ritmo y en vuestra imaginaci6n se levanta ingente la figure de Marti;-a veces como inc'inado por el enorme mun-