LA ORATORIA EN CUBA mundo. Pero la Iglesia quiere este divoreio que ella mantiene para si sola, a fin de otorgarlo a los poderosos de la tierra, poderosos cuando ocupan tronos, poderosos cuando tienen ri- quezas. Los casos de disoluci6n ordenados por la Iglesia son en verdad numerosisimos. En el campo de la historic se eneuen- tran un sinniimero de principles, de reyes y emperadores euyo vinculo ha sido disuelto con gran facilidad. El Emperador se imponia y la Iglesia cedia, o el Emperador pagaba y la Igle- sia lo satisfacia. Tambien ha habido un gran numero de per- sonas riquisimas cuyo matrimonio ha sido disuelto por la Igle- sia. En Cuba tambi6n ha habido casos, o por lo menos, se han intentado. Y aun ahora, en este moment, los sefores Representantes saben por los peri6dicos que se esti discutien- do la disoluci6n del matrimonio del Conde Boni de Castellane con Ana Gould, hija de ricos padres de los Estados Unidos; y la Iglesia ha estado para conceder el divorcio; no lo ha con- cedido ain, pero es muy probable que lo concede. Dumas, hijo, expone en un magnifico libro suyo un rasgo de un matrimonio disuelto por la Iglesia, despu6s de largos afios de haber vivido juntos y haber tenido un gran nimero de hijos. iClaro! La Iglesia puede disolver ficilmente el vinculo; la primer causa de disoluei6n es la siguiente: el error fisico o moral que pudiera haber tenido un marido en cuanto a su mujer o una mujer en cuanto a su marido. Fijese la CAmara: un error moral. Fisico se entiende cuando hay error de personas, cuando alguien crey6 casarse con una persona y se ha casado con otra. Pero moral puede significar todas es- tas cosas: yo crei que era un hombre honrado y no lo es; yo crei que era un hombre afectuoso y no lo es; yo crei que era un hombre bueno y no lo es; yo creia que no bebia, y an cam- bio bebe; yo creia que paseaba poco y en cambio pasea much. Senior Pino Quintana: Que iba a misa y no va. Seiior Ferrara Marino: Y esto podra entrar en el error de persona y en otro titulo mis de disoluci6n, a saber: el matri- monio de un cat6lico con una infiel. Sefior Campos Marquetti: Entonces se puede ser divorcista clerical. Seiior Ferrara Marino: Si, ustedes lo son, divorcistas y cle- ricales; pero sustrayendo el derecho de divoreio al Estado cu- bano y entregandoselo a la Iglesia.