LA ORATORIA EN CUBA tienen que estar bajo el amparo de las instituciones del Es- tado, nadie se ha ocupado de ellos. Y entonces los que se ocu- pan de los hijos de los divoreiados no lo hacen para favorecer a aquellos pequeinuelos, sino, solamente para oponerse al divor- cio, para mantener el vinculo matrimonial, para hacernos res- petar el matrimonio como un sacramento. Treilhard, en la Cimara francesa, en tiempos de la Revo- luci6n, trat6 de la cuesti6n del divorcio y decia asi: QuB su- cede de los hijos despu6s de la separaci6n? Sin duda el di- vorcio o la mera saparaci6n de los padres en la vida de los hi- jos marca una 6poca muy funesta; pero no es el acto del di- voreio o de la separaci6n lo que hace el dafio; es el terrible cuadro de la guerra intestina que ha hecho necesario el acto". i Y es evidence, y es claro que manteniendo los hijos dentro de la familiar desunida, dentro de las luchas dom6sticas, dentro de la insolencia y dentro de la infamia, es muy dificil conser- var la pureza de alma de los nifios, que desarrollindose dentro de ese ambiente aprenden a odiar al padre, mientras que lleva- dos a un hogar mis puro, a un hogar mis tranquilo, a un ho- gar mis honest, formaran sus propios sentimientos, elevarin su propia conciencia, cultivarfn su moralidad. Es much me- jor separarlos del mal y llevarlos al bien. # S'e ha afirmado que los hijos de divorciados perderin el amor de los padres, i como si las luchas todas de los divorcia- dos modernos y de las separaciones no girara alrededor de los nifios! El divorciado mantiene siempre el afecto para los hijos, y su iinica preocupaci6n en el pleito de divorcio es no perderlos. Son padres que quieren a sus hijos, y en la supre- ma lucha, cada uno va a sostener el derecho que tiene sobre ellos de cultivar su inteligeneia, de educarlos y hacerlos buenos ciudadanos. Voy a dar lectura nuevamente a algunas palabras dedica- das a los hijos en la cuesti6n del divorcio, por el doctor Seca- des: "Dicese que no habria inconvenient en admitir el divor- cio absolute para los casos en que no hubiera prole, pero nun- ca por ningfin concept para el caso en que la hubiere". No acertamos a explicarnos la raz6n de estas condiciones. A nuestro sentir, nunca estaria la persistencia de los hijos, puesto que, lejos de ser ellos las victims de la corrupci6n do- mistica, vendrian a ser los verdaderos redimidos...