EVOLUCI6N DE LA CULTURAL CUBANA Primero, por lo que se refiere al disentimiento en relaci6n con el primer inciso y al implicito reconoeimiento de que la amnistia que se concede, no pensando en la calidad del de- lito, sino en la cantidad de la pena, es un mal siempre bene- ficioso reducir el mal y recortarle cuando no se puede hacer totalmente desaparecer. Segundo, en relci6n con los delitos electorales, porque estimo, y ya lo dije en mi voto particular, lo que el senior Gar- cia Kohly decia ser su opinion y su sentimiento: que si nos- otros damos el ejemplo a este pueblo de que si los idelitos electorales van a ser realmente perseguidos, ca.be en lo po- sible que afiancemos nuestro regimen republican present, que todos aqui deseamos ver funeionar duradero y perenne; pe- ro si despertamos en el pueblo el sentimiento que se tiene de que violar una Ley Electoral es contraer un merito para con el Partido, entonces no tendremos en Cuba eleeciones sa- nas y si perturbaciones anilogas a las desdichadas que levan- taron delante de nuestras conciencias, una vez mis, el tre- mendo problema de nuestros padres y de nosotrois mismos en los afios primeros de la vida; sera Cuba o no serh una naci6n independiente, y que gracias a nuestra fortune hemos visto resuelto, como se resolvi6 el dia 28 de enero del afio ac- tual. Asi estimaba yo que la ensefianza mejor que pudie- ra darse en tales condiciones era la de mostrarse duramente inexorable en cuanto a las infracciones de la Ley Electoral. Discutiremos despu6s esta cuesti6n. Voy sefialando a los se- fiores representantes que habia algo de principios en mi disen- timiento. En cuanto a los incisos que ampliaban la amnistia a favor de los individuos del Ejercito Libertador y a los del Ej6rcito Constitutional, a los menores de diez y ocho afios y a las mu- jeres, porque estimaba que la condici6n y cualidmd de la per- ,ona para una gracia de esta naturaleza no debe ser nunca tenida en consideraci6n en lo que a la mejor condici6n de unos con respect de otros puede ser plausible para el bien, pero nunca para el mal, y much menos para el crime. Y en cuanto a mi disentimiento final de toda amnistia, deben ser excluidos los que hayan tenido distintos indultos, los que hayan gozado de beneficios anilogos anteriormente, los que hayan mostrado una repetida y constant inclinaci6n al de- lito. En este punto, retrocediendo ante indicaciones que me