EVOLUCI6N DE LA CULTURAL CUBANA de America a Europa en pocas horas, tengamos del tiempo el mismo concept que en el pasado. Una constituci6n de un cuar- to de siglo, como la nuestra, era antes recien nacida y hoy pue- de ser una Constituci6n anciana. Acepto, pues, en principio la iniciativa legislative de reformarla. Esto no quiere decir que este conforme con todas las mo- dificaciones que tratan de introducirse en el proyeeto que discutimos; esto quiere decir inicamente que mi Animo estA preparado para recibir una reform constitutional. Y esto lo he demostrado, no s6lo te6ricamente y en estos moments, sino que en los afios de 1913 y 1917 tuve el honor de presen- tar ante este Cuerpo un proyecto complete de reform de la Constituci6n de Cuba. Lo malo es que present un proyecto de reform constitutional serio, sustancial, cambiando el rB- gimen representative o presidential por el regimen parlamen- tario, por estimarlo mas convenient a mi pais, que podria discutirse en el orden de los sistemas y en el orden de las cpiniones; pero que nadie podria negar a este proyeeto, por mi presentado, seriedad y sustancialidad, y precisamente, ni seriedad ni sustancialidad, tiene el proyeeto que estamos dis- cutiendo. No es un proyecto serio y sustancial, porque no eambia el regimen, no varia el sistema, no toca los articulos fundamentals de la Constituci6n, porque es una reform de los articulos de segundo orden, sin traer nada esencial, nada doctrinal, ni siquiera firmes orientaciones en la nueva Carta fundamental. Es una reform vacilante y medrosa. Se man- tiene la Repdblica unitaria, pero se establece un Distrito Cen- tral en la provincia de la Habana, que, por much que sea el tacto con que se establezca, no dejara de alterar el sistema unitario, puesto que, desde entonees, todas las regions del Estado no se regirin por las mismas disposiciones, sino que la provincia de la Habana, contrariando el regimen de uni- dad, ofrecera una organizaci6n y sistema distinto al de las demis de la Repiblica. Se habla de que tenga la iniciativa de las leyes el senior Presidente de la Repiblica; pero me- drosamente se le hace ejercitar esa iniciativa por medio de mensajes que, despubs de todo, es lo que esta hacienda ac- tualmente. El proyecto de la Camara hacia compatible el cargo de Representante y Senador con el de Secretario de Despacho, y el dictamen de la Comisi6n del Senado supreme esa compatibilidad. Es decir, que se mantiene el carfcter