LA ORATORIA EN CUBA


President han de armonizarse los dos principios antes indica-
dos, para que de esa manera puela tener mayoria en la CA-
mura y en el Senado, pues de otro modo no puede legar a la
realizaci6n perfect de su cometido, sobre todo en las condicio-
nes dificiles en que se ha de encontrar el primer Presidente de
nuestra Repfblica. Creo, pues, que los principios constitucio-
nales establecidos nos obligan a respetar las minorias, segfin
manda la ciencia democrftida, cuyo espiritu ha dominado en
esta Convenci6n.
 Si 6ste es el criterio que predomin6 al hacer nuestra Cons-
tituci6n, no es possible que nosotros podamos aceptar el prin-
cipio del mandate imperative; y es indispensable, por tanto,
que se acepte el criterio de las minorias, puesto que no eabe
que lo que hagan las mayorias decide en definitive de la elecci6n
de President de la .Repiblica. Ahora bien, esos compromi-
sarios han de mostrarse sordos a cuantas indicaciones se les ha-
gan para entregar la Presidencia de la Rep6blica al menos apto,
aunque crean los eleetores que es el mejor. No se esta jugando
con un cargo cualquiera, no se estA siquiera eligiendo un Pre-
sidente en circunstancias normales de pais; se esta tratando
de nombrar a la persona que ha de inieiar los tratados de comer-
cio con los Gobiernos de las demAs naciones, y especialmente
con el de los Estados Unidos; es decir, se esta buscando al hom-
bre que pueda con su voluntad fire y con su tacto politico,
salvar la libertad y la unidad de nuestra naci6n, y no cabe, se-
fiores, que por prejuieios de grupos, que por prejuicios de par-
tidos, que por maquinaciones electorales, pueda quedar burlado
el verdadero sentimiento national. Son muchos los dias que se
fijan por la Comisi6n entire la eleceei6n de compromisarios y
la designaci6n de Presidente. No cabe hacer traici6n en esos
dias? S6 que va a decirseme que no cabe que partidos y grupos
elijan hombres capaces de variar ficilmente de criterio. Pero yo
digo: eso no es verdad. Los que ayer constituian una mayoria,
hoy se convierten en una minoria; y lo que era una minoria,
es hoy una mayoria; los que ayer sustentaban principios extre-
mos e irreconciliables desde el punto de vista de la independen-
cia mis absolute, hoy han modificado su criterio, aceptando ten-
dencias menos absolutas. Si eso ha sucedido en colectividades
political, si vemos a un partido politico proclamar un principio
de su program, para deseeharlo al dia siguiente, si todo eso
sucede en colectividades y en grupos de muchos individuos,