DISCURSO pronunciado por el doctor Alfredo Zayas Alfonso, en la se- sian del 21 de noviembre de 1900, sobre publicidad de las sesiones de la Convenci6n Constituyente. SELORES DELEGADOS: He pedido la palabra en contra de la enmienda del senior Morfa, porque estimo que las sesiones de esta Asamblea es preeiso, es indispensable, para el buen 6xito de la misma, que sean pfblicas; por consiguiente, sin entrar en los detalles del articulo 57, que es bastante largo, sin ocuparme de las excep- ciones que estableee, me import sostener el principio gene- ral que inform ese articulo, al punto concrete de la publici- dad de las sesiones de la Asamblea. El senior Moria Delgado ha clasificado a los sefiores delega- dos que asisten a esta Asamblea por lo que pudieramos llamar el grado de verbosidad que cada eual alcanza, a su juicio, y se- gin tengan mis o menos disposici6n para emitir su pensamien- to piblicamente, asi lo clasifica el sefor Morua, y de esa clasi- ficaci6n deduce su principal argument en pro de las sesiones secretas, o no piblicas, y digo no piblicas porque manifesta- ba el senior Moria Delgado que la palabra secret pudiera dis- gustar a alguno, y no he de haeer en ella hincapie. No veo que sea argument de fuerza, antes al contrario, de una extremada debilidad, puramente artificioso, el que los dele- gados tengan mis o menos timidez, mis o menos disposici6n, pa- ra manifestar en pfblico lo que piensan, por medio del discurso, de la moci6n, o por otro medio cualquiera de los que facility el Reglamento de esta Asamblea. Este Reglamento atiende preci- samente a esas circunstaneias que el senior Moria ha indicado, en las deliberaciones de las cuestiones arduas que tienen que some- terse a la Asamblea; deeia el senior Moria Delgado que era impo- sible que tuvieran lugar aquellas ante el public, por las circuns-