DISCURSO pronunciado por el senior Manuel Sanguily, on la sesi6n del 24 de enero de 1901, sobre la invocacikn del nombre de Dios en la Constitucidn de la Repiblica. SENORES DELEGADOS: Lamento much que por la escasez de mis fuerzas fisicas, a consecuencia de no encontrarme sano todaivia de depresiva in- disposici6n, y porque no tengo en este asunto el entusiasmio per- sonal que animaba la palabra del senior Llorente, necesite mis que en otra ocasi6n de vuestra atenta y generosa benevolencia. En las dos mociones que como enmiendas acaban de presen- tarse noto un parecido en el mismo punto en que esencialmente se diferencian de la Base presentada por la Comisi6n, lo que apa- rece determinado en la enmienda por la que el sefior Cisneros pretend que se suprima la frase en que se invoca el nombre de Dios en el Preambulo; y como seria necesario un analisis muy engorroso si se quisiera establecer por modo comparative la di- ferencia puramente verbal que hay entire el rest de aquel y la enmienda del senior Moria Delgado, ni siquiera habr6 de inten- tarlo; pero sin hacerlo y sin poder hacerlo, sin deber hacerlo asi, he de declarar, desde luego, ajeno sin embargo a toda in- tenci6n de lastimar al senior Moria Delgado en lo mis mini- mo, que prefiero-desde el punto de vista de la redacci6n-a la suya, la Base que ha presentado la Comisi6n. No podia, seg6n dije, sefiores delegados, tener el entusias- mo del senior Llorente en el punto capital que se dispute, por- que me pasa en realidad, respect a 61, exactamente lo que pen- saba el ilustre poeta frances Alfredo de Vigny--que como a ser perfect siempre se ama con tibieza a Dios, y por mi parte tampoco vengo a hacer ahora alarde de mis ideas ni much menos de mis sentimientos-, que en esta material no puede im- portarle a nadie saber si yo creo o no en Dios, ni tampoco pue-