OCTAVIO DE LA SUAREE Durante el regimen colonial en Cuba se decret6 tres veces la libertad de impreota: en 1812, 1821 y 1869, aboli6ndose entonces circunstancialmente la previa censura. Ademas, en 11 do noviembre de 1886 se aplic6 en el pais una Ley de Imprenta que subsisti6 hasta bien entrada la Repfiblica, hasta febrero 19 de 1914 en que fue derogada por el Congreso. Este detalle evidencia, como decimos, que la calentura no esti en, la ropa y que puede ser el instrument bueno y la aplicaci6n'mala. LIBERTAD NO ES, PERIODISTICAMENTE, INDEPENDENCIA Veamos a continuaci6n otro matiz: el de la lihertad en rela- ci6n con la independencia. Hay quien cree que ella es tan estrecha que los concepts son sinonimos. Pues bien: no es asi. Cuando una prensa es libre, enteramente libre, esta mas sujeta que nunca a su c6digo de etica propio, a la ciudadania, al Estado, a la humanidad, posee, aunque parezca absurdo, menos inde- pendencia. Tiene todas las independencias a su arbitrio, pero no la Inde- pendencia, ya que lejos de no defender de nadie depend del valor moral que ha creado y que es el mtis considerable en el periodismo: de su credit ante la opinion. El caso del Journal de Sotteville, del Tilloy, pequefia localidad francesa, es un ejemplo de esta tesis. Fundado en 1874, se habia mantenido vigoroso dentro de su modestia -s6lo aparecia una vez por semana- hasta poco antes de la segunda guerra mundial. En los filtimos comicios comunales su Editor fu6 electo y comenz6 a actuar oficialmente con olvido absolute de su program y de los ideales del Journal de Sotteville, cuyos redactores, cogidos entire el compafierismo y la moral, no se creyeron con "independencia" bastante para continuar su ministerio y acordaron suspender la pu- blicaci6n del peri6dico. LIBERTAD E INDEPENDENCIA NO DEBEN ENQUISTAESE EN LA NEUTRALIDAD A otro peligro puede Ilevar al periodista una nala noci6n de su independencia: al de la neutralidad sistemitica. La vida es lucha constant, movil de superaci6n, en fin, etica que batalla por convertirse en estetica y por eso la sociedad es un