LOS NEGROS CURROS tir y de portarse, que el verbo acurrar y el participio adjetivado acurrado han quedado en nuestro lenguaje verniculo. (1) Puede observarse en esta descripci6n externa del tipo acu- rrado, en sus indumentos chillones y llamativos, y en sus anda- res diferenciados totalmente del comin de los demis hombres de sus 6poca y ambiente, el reflejo fidelisimo de su caracter predo- minante, de su alma tambi6n chillona, llamativa, exhibicionista, en fin, de su gran vanidad. Caricter predominante hemos di- cho, y no era mis aun que el de su delincuencia. Fueron los curros criminals, sin duda; pero eran sobre todo hombres inferiores y parasitarios, mas de tal exacerbada vanidad, que ayudados por concausas favorables pasaban de la ostentaci6n a la impulsividad y de 6sta a la prepotencia, y de aqui al ma- tonismo y al crimien, con breves pasos. (1) Insertamos a continuaci6n las papeletas relatives del Lizico Cu- bano de J. M. DIHIGo. ACURRADO-DA.-Con este americanismo se indica la persona que en sus maneras, en su traje o en ambas cosas a la vez, ostenta cualidades propias de un curro o majo. Aparece en Pichardo y en Suarez con identidad semrntica; Macias no lo trae, como tampoco Salvi y la Academia, pero si Alemany en el sentido dicho y Rodriguez Navas. No se ve al trav6s de los diccionarios escritos por los lexic6grafos americanos, por lo que es de vacilarse sobre el caracter de americanismo general que le dan Suarez y Rodriguez Navas. "viendo los cielos abiertos con la entrada del paje conductor que renovando sus acurradas cortesias". Los cubanos pintados por si mismos, Habana, 1852, p. 311. AcuaBAo.-Forma que no aparece en los 16xicos cubanos, no obstante su uso por los escritores que remedan el habla de la clase negra y que represent el desvanecimiento de la dental sonora intervoclica; es caso frecuente en America como en todos los dominios del castellano se dice acurrado. Por ella me hubiera acurrao. (J. V. BETANCOUaT, El Negro Jos4 del Bosario: El Liceo de la Habana, 19 junio 1860.) AcuRRAB.-Pichardo nada dice. Macias incluye esta forma para in- dicar el que imita los ademanes, las posturas, las modas o la pronunciaci6n de los curros. Su~rez trae acurrarse con igual sentido. La Academia no incluye esta forma verbal en su diccionario (1914), ni tampoco Ale- many ni Salv&. La callan los lexic6grafos hispanoamericanos y no apa- rece en la relaci6n de provincialismos espaioles. Ignoramos hasta qu6 punto pueda afirmarse que sea un americanismo este t6rmino, mis bien un cubanismo, dado que ni Gagini, Rodriguez, Calcafio, Granada, Zeballos, Icazbalceta, Malaret, Palma, Roman, Cuervo, registran la voz.