ARCHIVES DEL FOLKLORE CUBANO luz, mas su explicaci6n no es de este sitio y sera objeto de detenida atenci6n mas adelante. Ademhs de negros curros, se llamaban del Manglar y con este calificativo han llegado hasta nuestros dias. El Manglar era un barrio extramuros de la Habana, en el litoral de la bahia, asi llamado por la abundancia de mangles (1) que en Bl se encontraban, lo cual basta para demostrar lo poco poblada que debia estar tal cenagosa barriada, pues ma- rismosa y encehagada tuvo que ser y era en realidad esa tierra para arraigo y desarrollo de aquella planta.. En este barrio tenian sus reales los negros curros y de ahi el calificativo. Por eso nuestro escritor costumbrista Jose V. Betancourt (2) dijo: "El Manglar era la Hampa de la Habana, asquerosa poeilga donde vivian en mezquinas casuchas una numerosa po- blaci6n casi toda africana, antes del incendio que la convir- ti6 en cenizas el afio 1802." No fu6 finico el barrio del Manglar como asiento de los eurros, pues los suburbios del Horc6n y de Jesfs Maria tam- bien contaron con curros famosos; pero los del Manglar eclip- saron a todos, asi por su nimero como por sus fechorias, y la tradici6n nos ha conservado este nombre como la tipica loca- lizaci6n topogrAfica de la heria habanera; cuya zona, dicho sea de paso, no ha perdido totalmente sus tristes prestigious de hace mas de un siglo. Los curros del Manglar, los negros curros en general, debie- ron su renombre a su vida hampona, por lo que algunos los confunden con los uiiiigos, y a veces hasta con los brujos. Por lo menos puede asegurarse que la distinei6n entire esos diver- sos personajes de la mala vida habanera, lejos de ser perfeeta, es por lo cominn, equivoca y borrosa, en el pueblo y en los es- critores, como puede verse por el siguiente pirrafo, nada me- (1) Arbol may coming en Cuba, que eubre las costas, eayos y ori- las de los rios en sus desembocaduras y los esteros y eostas cenagosas del mar. Hay varias species de mangle (Avicennia iitida, rlWzophora candel, etc.) (2) En El Artista, revieta habanera, T. 19, No. 21, 31 die. 1848. La comparaci6n no era del todo precise, pues el Manglar era un concept s61o geografico y la Hampa lo era s61o sociol6gico. Otras eomparaciones pudie- ron hacerse y se haran en esta monografia, fundiendo ambos sentidos.