MENSAJE AL AYUNTAMIENTO Nuestro esfucrzo mayor y nuis efi,:azmente ortentndo, por dar cumplimiento a las promesas que hicimos al pueblo de La Habana al solicitar sus sufragios, lo cons- tituye el edificio que en terrenos de la propiedad municipal hemos construido, con el concurso entusiasta y decidido de ese Consistorio, para instalar en el una Escuela para nihias pobres; y mas que dsto, las medidas que por nosotros se adoptan al pre- sente, para que esta Escuela, sea, en mayor escala que el propio Colcgio Jos& Miguel G6mez, teatro de exvperimenta,.i6n en que todo el magistcrio cubano ensaye aqucllos imetodos de enseiianza que la modern pedagogia recomienda com los msu adecua- dos para sustituir los que inflexiblemente han Pido observados por nosoros en el pa- sac o, con detrimento de nuostro nivel de cultural. Mds que en las coslumnbres, nuis que en las tdcticas politzcas y electorates, casl tanto como en la economic national, y en la distribuci6n de las riquezas, urge reali- zar una intense Revoluci6n en la Escuela PI'blica (eclipsada en la actualidad por una Escuela Privada que se escapa a la legemonfa del Estado) y sin la cual nin- guma transformacion que se intente en los demns se'tores de la actividad national ya citados, podrd dar frutos permanentes. A iniciar esa Bevolucidn van encaminadas nuestras gestiones de cardcter edu- oaoional, porque entendemos que la Escuela no habrd cumplido su objetivo hasta que no proporcione a Cuba, hombres sanos, instruidos y felices; capaces de resolve los problems de sus propias vidas, y de ayudar, con entusiasmo, a cncontrar soluci6n atinada, a los problems colectivos. 102 Seeci6n de Propaganda Por sus obras lo conocereis. De acuerdo con ese pre- cepto biblico hay que reconocerle extenso cr6dito al doctor Antonio Beruff Mendieta, actual Alcalde Municipal de La Habana. Entre las iltimas iniciativas del Mayor habanero se des- taca proferentemente la Escuela para niias que habrd de inaugurarse en el entrante mes de Noviembre y que os- tentard el nombre del sabio educador cubano doctor Al- fredo M. Aguayo. El adjunto Mensaje expone elocuentemente lo que se- rt esta bella iniciativa ya plasmada en realidad: