KETIRO DE PESIODIOTAS TRIUNFAMOS Y TRIUNFAREMOS Por Modesto MORALES DIAZ La incredulidad, que es una de las earacteristicas de mayor privanza entire nuestros compatriotas en general, pisose de manifiesto con mayor relieve que nunca entire la gran familiar periodistica, al hablarse de la posibilidad de obtener del Con- sejo de Estado y del Presidente Mendieta una Ley de Retire. Ni porque surgiera de entire los propios periodistas, vigorizada con el consensus de la Asociaci6n lo0 la Prensa de Cuba y de la Asociaci6n de Rep6rters de la Habana, que' en raro co,- eierto de uninimes voluntades se dispusieron a calorizarla e impulsarla, lleg6 a con- veneer de su viabilidad a los eternos pesimistas. Bast6 que una robusta mentalidad y espiritu select, destacada figure del foro y del periodismo cubano, como el doctor Rafael Maria Angulo tomara la iniciativa, redactara, presentara y defendiera la Ley con fe y ardimiento, en el seno del Con. sejo de Estado, del que era miembro distinguidisimo, para verla cristalizar. No fu6 una Ley improvisada, sine por el contrario muy meditada. El doctor Angulo utilize cuanto estim6 utilizable de la Ley de Retire, presentada en la Ca- mara afios ha, por el talentoso doctor Pastor del Rio, pleno siempre de ideas gene- rosas y nobles empeiios, entonces Legislador y lo mismo hizo con un proyecto que present en la Asociaci6n de la Prensa de Cuba el notable Jurisconsulto doctor Pe- dro Herrera Sotolongo, a la saz6n Vice-Presidente de la misma. Tuvo ademis a la vista el doctor Angulo las Leyes de Retiro que rigen en Chila y otras Repfblicas Americanas y las de diversos paises Europeos, de todas las cua- les procur6 captar cuanto podia ser aplicado a nuestra legislaci6n. Los compafieros de las Artes Grificas no fueron incluidos en los beneficios do la Ley, porque expresamente acudieron ante el Consejo de Estado, Linotipistas, Ti- p6grafos, Prensistas y demis, para pedir que se les excluyera de la Ley rn qiw tambi6n figuraban. Y mis viejos compafieros los periodistas de tierra adentro a quienes remitimos mfs de eien copias encareci6ndoles que estudiaran el proyecto y nos enviaran cuan- tos reparos, modificaciones o sugerencias estimaren pertinentes, ni uno solo, asi como suena, nos acus6 recibo en sus peri6dicos, los que estaban en active, ni tam- poco aquellos, que como luego hemos visto se han apresurado a acogerse a los bene- fieios del Retiro. 1Los periodistas de la Habana en general, tampoco se tomaron la molestia de leer la Ley, que fu6 adelante y triunf6 a pesar del ningin ambiente encontrado en nl propia clase que habia de ser beneficiada.