donde las podian hallar. Entonces caravanas cruzaban los de- siertos trayendo y Ilevando la tan apreciada mercancia. Ninive y Babilonia, Cartago, Alejandria, Roma, eran los mercados don- de mayor consume se hacia de las especias transportadas por aquellas caravanas. En la Biblia encontramos detalles comple- tos de este comercio. El rey Salom6n traficaba en especias. En este negocio se asoci6 con el rey fenicio Hiran, y cuando la fabulosa reina de Saba visit a Salom6n, le trajo gran cantidad de bestias cargadas de las mAs apreciadas especias. En la Bi- blia, Tercer Libro de los Reyes, capitulo X, versiculos del 1 al 13, se describe el primer encuentro entire la reina de Saba y Salom6n. Es tan sugestivo, que me lo aprendi de memorial: iDichosos los que estAn contigo! ;Dichosos tus criados, que gozan siempre de tu presencia y escuchan tu sabiduria!, ex- clam6 la reina al ver por primera vez a Salom6n. Luego se narra que la reina entr6 en Jerusal6n con muchisimos camellos cargados de especieria y oro y piedras preciosas para obsequiar a Salom6n. cNunca jamAs en adelante se trajo a Jerusaldn tan- ta cantidad de especierfa, como la que regal6 la reina de Saba a Salom6n.D Siglos despu6s, los griegos y los romanos siguieron considerando el reino de Saba, que hoy se llama Yemen, como la tierra de las especias. Durante el reinado de Augusto, las tropas romanas, al conquistar diversos reinos arabes, forzaron a sus comerciantes a descubrirles las rutas para llegar a las regions donde se producian los tan codiciados elements de la cocina. Vino a ser en las postrimerias del reinado de Tiberio cuando los romanos lograron Ilegar a los paises de la especie- ria. Tacito asegura que Ner6n hizo cubrir con tallos de canela el fondo de la tumba en que fueron sepultados los despojos de Popea. Despu6s, con las invasiones de los visigodos, escasearon los suministros de especias y s61o los potentados romanos lo- graban obtener algunas a precious enormes. Lo mismo ocurri6 durante los primeros tiempos de la Era Cristiana: solamente los principles y los altos dignatarios de la Iglesia podian disfru- tarlas. Con la ocupaci6n de Espafia por los moros en el afio 700, revive en Europa el mercado de especias. Despuds, cuando los mercaderes de la Reptblica de Venecia llegan en sus barcos hasta el lejano Egipto, se intensifica el trifico de las es- pecias y su uso aumenta considerablemente. Aun asi, las es- pecias eran un lujo. La pimienta se vendia por granos. Con Io que valia una libra de jengibre se podia comprar un esclavo. Las Cruzadas abrieron nuevos mercados. Bagdad y Constanti- nopla fueron ricos emporios en este comercio. Los viajes de