los ritones del festin, Ceramos, Phitos, Canthoros, vagamente modelados en coperos de barro, escoltan trabajosamente a los bebedores; vacilan sobre sus pies, ain cubiertos por la arcilla de los z6calos, cual jarros mal equilibrados, y dejan correr por sus hendeduras el rojo licor de que estAn colmados... --Entre los hombres distinguidos y los principles, habia alg6n refinamiento? -inquiri6 Vergara. -A pesar de que los griegos vivian en una tierra Arida, el vino y su natural temperamento los hacfa de gustos delicados. En la Otro gran poeta griego, Epicarno, cuatrocientos cincuenta afios an- tes de nuestra Era, se atrevi6 a poner en boca de uno de los personajes de su obra intitulada uFiloctetes, esta frase que podria figurar en el escudo national de Francia: vno hay diti- rambo possible si se ha bebido agua. -En contrast con estos refinamientos, tenemos la fruga. lidad de los espartanos. Segdn la tradici6n, fue Licurgo quien impuso a su pueblo el tan comentado plato negro que consti- tuia la comida diaria de los lacedemonios. Consistia en un simple hervido de came picada con vinagre y sangre. Cicer6n, en su obra <