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Ilenos de muchachas de la sociedad del pueblo, en una
gran gira; que hay ventas en tal parte porque alli estin
renovando various tablones de cafia -1feliz bodegue-
ro!-; que aqui no se vende porque no habrA cultivo;
que alli tampoco; que botaron al bodeguero tal porque
encontraron a su mujer en la tienda vendiendo mientras
el estaba en la letrina; que le dieron una de las mejores
bodegas a un fulano porque tiene dos hermanas bonitas
o porque su mujer se va al pueblo con Mr. Lilo, sin otra
compafiia, "a pasar dos dias donde una tia"; que un
policia ayer le dispar6 "al aire" a un negro que robaba
una caiia tierna por hambre, "para asustarlo', y que le
hizo blanco; que el negro muri6 "de paludismo".
 De eso hablamos casi siempre, refiriendo cosas nue-
vas que parecen viejas por lo much que se repiten. S6lo
la iiltima vez me dijo Eduardo que algo especial le traia
a mi bodega.
 -He venido -me explic6 de golpe-, para ponerte
en guardia contra el nuevo bodeguero que te han puesto
de vecino.
 Yo le pregunte:
 --El que sustituy6 a Valerio?
 Y 61 me dijo:
 -El mismo.
 Luego:
 -Es peligroso confiarse a 61L Tu eres muy sencillo
y dices las cosas fAcilmente. Debes tener gran cuidador
porque se trata de un perro espia del asistente que
tambi6n sirve al aleman.
 Senti la impresi6n que sacude al que repentina-
mente se enter de que si mueve un pie va a pisar una
vibora, porque s6lo esto me faltaba: ique fuera espia
mi vecino!