334 CUADERNO DE CULTURA adonde fu6 enviado la noche del 29 de septiem- bre, con pliegos oficiales en que se comunicaba a Tac6n la ilegada del Guadalupe y la proclama- ci6n del C6digo de 1812, por acueydo uninime de todos los jefes y autoridades de Cuba. L6pez lleg6 a la Administraci6n de La Habana el 9 de octubre, e inmediatamente Tac6n orden6 que saliese de la ciudad; mas, en el punto en que se disponia a partir, un ayudante d1 Capitdn Ge- neral le condujo al Palacio de Gobierno donde se le introdujo por una escalera excusada, y alli en presencia de un vigilante, le tuvieron senta- do en un baneo, desde las diez y media de la ma- fiana hasta las cuatro y media de la tarde, en que, acompafiado de otro ayudante, volvi6 a la Administraci6n, donde le entregaron dos plie- gos, uno para el administrador de Correos de Trinidad y ot.ro para el de Puerto Principe, ha- cindole salir inmediatamente, sin permitirle si- quiera que tomase el preciso alimento. Al Ilegar L6pez al pueblo de Gudimaro, se le uni6 el co- mandante de la Cuadrilla Rural don Benito Ta- pia, a la cabeza de cuatro hombres; entonces su- po L6pez la resoluci6n tomada el 9 de octubye por Tac6n, de incomunicar el Departamento Oriental. Hombres mis expertos en las luchas politi- cas, hubieran confiado menos en la actitud de los estadistas que en aquellos dias dirigian los destinos de la Naci6n. Pensaron que ahora, co-