ECONOMIA Y CIVISMO 267 rios de Mxico, de Colombia y de Buenos Aires, que convirtie.ron el dilatado mar Atlantico en un lago americano, cuyas aguas no podian los bu- ques espafioles surcar sin riesgos inminentes. Le- vdntase entonces el Consulado de La -Habana y bajo la presidencia del general Cienfuegos, en junta abierta a que tuvieron acceso los vocinos, acuerda, la noche del 12 de julio de 1816, que se abra un empristito de doscientos mil pesos que de momento se necesitaban para armar y equipar cuatro buques de diecis6is a veintid6s caiones, y dos menores en calidad de moscas, para arrojar de las costas de la Isla y exterminar, si posible fuese, a los piratas rebeldes que interceptaban la navegaci6n y hasta alarmaban la pdblica tranqui- lidad. En aquella reunion, en que parecia surgir y determinarse por lineas mas definidas y vigo- rosas la naciente personalidad de la colonia, al- z6 la voz Ilincheta para pintar con colores tan vivos como files, el grado de ruina y miseria con que amenazaban unos enemigos execrables a quienes tal vez protegian amigos poderosos, y a quienes los vecinos podian arrojar de estos mares y exterminar tambiin con el discreto y bien calculado desprendimiento de una minima parte de la fortuna de cada uno. El Consulado y los vecinos convinieron asimis- mo en que el emprdstito se reintegrase con los recursos que se arbitraron, renovando al efecto el socorro extraordinario que habia cesado en fin de febrero de aquel mismo afio. Los guardacostas