ECONOMIA Y CIVISMO 75 necesidades geneyales del Imperio espafiol en am- bos mundos, sino que el Estado subsistia de los recursos que podia allegar, sin presupuesto ni limite alguno, ya en la metr6poli, ya en cualquie- ra de sus dilatados dominios. Los fondos que in- gresaban en las Cajas de la madre patria o de las colonias, estimdbanse como propiedad del Era- rio y el Rey, personificaci6n del Estado, eya libre de emplearlos como juzgase conveniente al servi- cio publico. La idea de Lin sceo Erario. en termi- no final, no podia menus de resultar ventajosa a una ruetr6poli siempre comprometida en mili- tares empresas superiores a sus recursos: el pro- cedimiento era una consecuencia del sistema que obligaba a Espahia a exprimir. hasta agotar, la savia de sus colunias por sostener el brleo febril de su decadencia politica. Y tan monstruosa lie- g6 a ser la desproporci6n con que se repartian las eargas del Imperio entre los pueblos de la madre patria y los de sus colonias; tanto ileg6 a extremarse el procedimiento de las exacciones enormes y continues, que, por no bastar los cau- dales existentes en las Tesore.rias a satisfacer corrientemente las obligaciones que se imponian al arbitrio del Rey, se amontonaban por millones las libranzas de los Ministros contra las Cajas de los paises americanos. No concebian los esta- distas espafioles -y si la concebian, no era po-