62 CUADERNO DE CULTURA en la Real Hacienda, con destino a la amortiza- ci6n de los vales reales, los restos de las tempo- ralidades de los extinguidos jesuitas, expulsados de tierras espafiolas, trasladindose la Superin- tendencia General de las Temporalidades, radi- cada en el Ministerio de Gracia y Justicia, al de Hacienda, por el cual se expedi.rian las instruc- ciones y 6rdenes conducentes a su administra- ci6n, como a la de los dem.s ramos y rentas de la Corona y real patrimonio, y se darian las pro- videncias econ6micas que se requiriesen para la pronta venta y realizaci6n de cualesquiora bienes y efectos existentes. Al comunicar esta resolu- ci6n soberana al Visitador General Intendente de Cuba, se le advertia que era voluntad del Rey que todos los caudales que se fueran acopiando se tuviesen prontos para remitirlos a Espaila, a la consignaci6n del Ministro de Hacienda (34). En cumplimiento de estas resoluciones del Go- bierno Supremo, el Visitador General don Jos6 Pablo Valiente (35), tom6 a la casa de Santa Maria y Cuesta de La Habana, dos letras de cin- cuenta mil pesos cada una, a sesenta y a noven- ta dias vista, contra don Pedro Tiz6n de Malaga, y de esta manera los bienes confiscados a los je- (34) Real orden de 19 de septiembre de 1798, en que se traslada el real decreto pasado en la misma fecha por el Minis- terio de Gracia y Justicia. (35) Consulta del Visitador General al Ministerio de Ha- cienda, el 9 de febrero de 1799.